Las autoridades ucranianas han reprochado a sus socios que no están haciendo lo suficiente para controlar las cadenas de suministro a tenor de las "grandes cantidades" de "componentes occidentales" que se encuentran en el interior de los proyectiles que Rusia está lanzando durante su invasión. "Si abres cualquiera de estos misiles o drones, se puede ver que están llenos de componentes occidentales", ha dicho el jefe de los servicios de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, Kirilo Budanov. "Las empresas pueden decir que no están vendiendo nada a Rusia, que sólo están vendiendo a algunos intermediarios, pero esto no cambia que estas piezas llegan a Rusia en grandes cantidades", ha criticado, en declaraciones a Bloomberg. Budanov ha censurado "que todo el mundo esté mirando para otro lado" en este asunto e insiste en que la única manera de cortar la capacidad del Kremlin es detener este flujo de piezas y equipos que van directas "a las unidades de primera línea que lanzan por toda Ucrania". De acuerdo con la citada agencia, es habitual hallar en el interior de los proyectiles que utiliza Rusia piezas fabricadas por empresas estadounidenses y alemanas, como Silicon Laboratories o Infineon Technologies. Dichas piezas no se venden directamente a Rusia, sino que llegan a través de empresas con sede en China y Hong Kong, sobre todo. Las compañías estadounidenses utilizan distribuidores que venden a proveedores autorizados de todo el mundo, lo que habría servido para sortear las restricciones. Así, si bien el Departamento del Tesoro impuso a finales de agosto sanciones a más de 400 empresas eludir estas restricciones, más de una docena de ellas procedentes de Hong Kong, no lo hizo así con numerosas compañías estadounidenses que también estarían violando estos controles de exportación.