RSF denuncia el apagón informativo en Gaza por la represión israelí a los periodistas

Reporteros sin fronteras denuncia la muerte de más de 130 periodistas palestinos en Gaza y exige el cese inmediato de la violencia y la apertura del acceso a reporteros extranjeros

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París, 3 oct (EFE).- Reporteros sin fronteras (RSF) critica el "apagón" informativo que ha impuesto Israel en Gaza desde hace un año con ataques a los periodistas que tratan de contar lo que ocurre en este territorio palestino y todo ello "en un clima de impunidad generalizado".

"Las fuerzas israelíes han hecho todo lo que han podido para impedir la cobertura de lo que sucede en Gaza poniendo sistemáticamente en la diana a los periodistas que, para hacer su trabajo, están sometidos a riesgos considerables", subraya la directora de campañas de RSF, Rebecca Vincent.

En un comunicado publicado este jueves, Vincent subraya que mientras los periodistas en ese territorio están siendo "aniquilados", los reporteros extranjeros tienen prohibida la entrada y los que han podido informar desde el interior, lo han tenido que hacer "bajo la estricta vigilancia del Ejército israelí".

Desde que hace un año comenzó la guerra desencadenada por el ataque de Hamás en territorio israelí el 7 de octubre de 2023, la organización lleva contabilizados "más de 130 periodistas palestinos asesinados por las fuerzas israelíes en Gaza".

De todos ellos, "al menos 32" murieron cuando hacían su trabajo, recuerda Reporteros, que critica que los que siguen ejerciendo su oficio son con frecuencia víctimas de "campañas de propaganda" en las que se cuestiona su integridad, se les acusa de trabajar con combatientes o de haber participado en la operación de Hamás el 7 de octubre.

Vincent insiste en que "todos tenemos derecho a saber qué ocurre en Gaza" y por eso su organización reclama "con la mayor firmeza" que pare inmediatamente la violencia contra los periodistas, que se ponga fin a la impunidad de los ataques pasados y que se abra sin más dilación el acceso a los periodistas extranjeros. EFE

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