El ataque perpetrado en septiembre contra un buque que transportaba grano en el mar Negro se debió "probablemente" a un error de las Fuerzas Armadas rusas, según los servicios de Inteligencia de Reino Unido, que lo atribuye a los problemas de la aviación rusa para alcanzar objetivos. El incidente tuvo lugar el 11 de septiembre, cuando el carguero 'Aya' sufrió el impacto de un misil cuando navegaba al sur de Odesa con más de 26 toneladas de cereales para Egipto. Los expertos británicos han identificado el proyectil como un misil antibuque disparado por un bombardero y han apuntado que si el barco no sufrió "daños catastrófico" fue por un posible fallo en el mecanismo de detonación de una munición obsoleta. "Hay una posibilidad realista de que este incidente se debiera a que los pilotos identificaron por error el 'Aya' como objetivo de manera apresurada, con vistas a salir de la zona inmediatamente después del lanzamiento por miedo a ser atacados por un misil tierra-aire ucraniano", reza el informe divulgado este miércoles por el Ministerio de Defensa de Reino Unido. Desde el inicio de la invasión de Ucrania en febrero de 2022, las Fuerzas Armadas rusas han atacado diversos objetivos en el mar Negro, pero la pérdida en abril de un bombardero les habría hecho ser ahora más "cautas".