Jerusalén/Beirut, 3 oct (EFE).- El Ejército israelí aseguró este jueves que el grupo chií Hizbulá está empleando el principal puesto fronterizo sirio-libanés, conocido como Masnaa en el Líbano y Jdeidet Yabous en Siria, para introducir material bélico en el país y amenazó con "actuar (atacar)" si el Ejército libanés, que lo controla, no evita la entrada de camiones con armas.
"El Ejército (israelí) no permitirá el contrabando de estas armas y no dudará en actuar si se ve obligado a hacerlo, como lo ha hecho durante toda esta guerra", aseguró el portavoz en árabe de las Fuerzas Armadas israelíes, Avichay Adraee, en su cuenta de X.
Ante las amenazas, las autoridades libanesas se han limitado a confirmar que son ellas quienes controlan dicho cruce y todos los del país.
El ministro libanés de Obras Públicas y Transportes, Ali Hamie, aseguró este jueves en una rueda de prensa que "todos los pasos fronterizos, el primero de ellos el de Masnaa" se encuentran bajo la vigilancia de las instituciones estatales, como el Ministerio de Transporte, las autoridades aduaneras, la Dirección General de Seguridad y el Ejército libanés.
El comunicado israelí denuncia que el grupo chií libanés Hizbulá ha trasladado las operaciones de transporte de "medios bélicos" al puesto de Masnaa, empleado para el transporte civil.
"El Estado libanés es el responsable de sus cruces fronterizos oficiales y puede impedir que Hizbulá pase por estos cruces", agrega Andraee.
Según el comunicado militar israelí, aviones israelíes ya han bombardeado pasos fronterizos empleados por Hizbulá para introducir armas en el Líbano desde Siria, lo que, según su versión, le ha forzado a transportar el material bélico a través de Masnaa.
"Desde que el jueves pasado se atacaron los centros de contrabando en la frontera sirio-libanesa, el cruce fronterizo de Masnaa se ha convertido en el principal cruce a través del cual Hizbulá transporta medios de combate", señaló el portavoz militar israelí.
El cruce de Masnaa está situado en la arteria principal que une Beirut con Damasco y ha sido utilizado por la mayoría de los 128.000 refugiados sirios y libaneses que han huido de los ataques israelíes contra distintas localidades libanesas.
Unas 2.000 personas han muerto por ataques israelíes desde hace un año, la mayoría en los últimos días, mientras que la violencia también ha obligado a más de 1,2 millones de personas a abandonar sus hogares, según el Gobierno libanés. EFE