El secretario general de la ONU, António Guterres, se ha confesado "extremadamente preocupado" por la escalada del conflicto en Líbano y ha reclamado a todas las partes un "alto el fuego inmediato", con vistas a evitar una "guerra a gran escala" y aplacar la actual tensión. Guterres ha pedido respeto para "la soberanía y la integridad territorial" de Líbano, horas después de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) lanzasen una incursión terrestre para contener la amenaza del partido-milicia Hezbolá, cuyo líder, Hasán Nasralá, falleció el viernes en un bombardeo israelí en Beirut. El máximo responsable de la ONU mantiene contactos con distintos actores y este martes ha hablado con el primer ministro en funciones de Líbano, Nayib Mikati, ante quien ha reiterado que todo el sistema de Naciones Unidas está "movilizado" para ayudar a su país. De hecho, Guterres ha apelado a la comunidad internacional a cubrir de forma "urgente" el llamamiento humanitario lanzado este martes y que reclama casi 426 millones de dólares (unos 383 millones de euros), según un comunicado de su oficina.