Madrid, 30 sep (EFE). Cuando los verbos “hacer” y “dejar” van seguidos de un infinitivo o de una oración subordinada y significan ‘obligar’ y ‘permitir’, respectivamente, pueden construirse con pronombres de complemento directo (“lo”/“la”) o de complemento indirecto (“le”), explica la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE), promovida por la Agencia EFE y la RAE.
En estas estructuras, el sujeto del verbo “hacer” o “dejar” es el que causa o consigue que otra persona o cosa realice o sufra la acción del verbo que aparece después. Por ejemplo, en un enunciado como “La chica hizo reír a su amiga” es la chica quien provoca la risa de su amiga. Para determinar si, en este caso, el complemento que alude a la persona que ríe es directo o indirecto, se debe tener en cuenta lo explicado a continuación:
1. “La dejé entrar” o “Lo hice volver a casa”Cuando alguno de estos verbos va seguido de un verbo intransitivo, la persona que es obligada o a la que se le permite algo se concibe como el complemento directo, por lo que se suelen construir con los pronombres “lo”, “la”, “los”, “las”: “No los dejamos salir después del cumpleaños”, “La hice pasar para hablar con ella” o “Lo dejé correr para que se relajara”.
2. “Les dejamos ver la foto” o “Le hicimos buscar la solución”Si los verbos “dejar” o “hacer” van seguidos de un verbo transitivo, lo habitual es entender que la persona que experimenta la acción denotada por el verbo subordinado es el complemento indirecto, pues ese verbo ya tiene un complemento directo. Por lo tanto, se tiende a emplear los pronombres “le” o “les”: “¿Le dejaste preparar la comida?”, “Dejadles ganar el partido” o “Les hicimos pagar la cuenta completa”.
La FundéuRAE (www.fundeu.es), promovida por la Agencia EFE y la Real Academia Española (RAE), tiene como principal objetivo el buen uso del español en los medios de comunicación.
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