Lisboa, 30 sep (EFE).- El primer ministro de Portugal, el conservador Luís Montenegro, aseguró este lunes que habrá una "investigación profunda" sobre el operativo que se desarrolló contra la ola de incendios que sufrió el país este mes, así como contra los posibles responsables detrás de los fuegos.
Luís Montenegro realizó estas afirmaciones en una visita junto al jefe de Estado, Marcelo Rebelo de Sousa, a Vila Pouca de Aguiar (distrito de Vila Real, norte), una de las localidades afectadas por las llamas de hace dos semanas, que provocaron la muerte de al menos siete personas (cuatro bomberos y tres civiles).
En declaraciones a periodistas, agradeció a los efectivos de los bomberos y la protección civil su trabajo durante esa semana, y, ante las críticas de algunos alcaldes de que no había medios suficientes, añadió que llevarán a cabo "una investigación profunda" sobre el combate, los sistemas de emergencia y su gestión.
Por otra parte, señaló que fue "muy extraño" el patrón en ciertos incendios, como que hubiera 125 igniciones en una misma noche o varios fuegos en la misma unidad territorial "sin que hubiera una explicación plausible para eso".
En esa línea, defendió que el Gobierno "tiene la obligación moral de saber todo lo que está detrás de esto" y garantizó que él hará "un esfuerzo grande para que haya investigaciones que lleven a la detención y condenación de todos los responsables de los incendios".
Desde el 14 de septiembre han sido arrestadas al menos 11 personas -nueve hombres y dos mujeres- por ser sospechosas de haber provocado incendios forestales en Portugal durante esa ola de fuegos, según los datos publicados por la PJ.
Sobre la recuperación de las zonas ardidas, Montenegro dejó una "palabra de gran solidaridad" a los afectados y recordó que todos los mecanismos de ayuda ya fueron accionados "con mucha celeridad".
"Ya tenemos en este momento 100 millones de euros disponibles para iniciar el proceso de recuperación. Tenemos un acuerdo con la Comisión Europea para el uso de hasta 500 millones de euros", añadió.
Por otra parte, el jefe de Estado luso aseguró que tanto él como el Gobierno estarán "siempre juntos" en lo que se refiere al combate a las llamas.
En un encuentro con alcaldes, Rebelo de Sousa pidió una respuesta "rápida, rigurosa y eficaz" ante una situación que es "causa nacional".
Los más de mil fuegos declarados este mes, que arrasaron más de 100.000 hectáreas en el norte y centro del país, obligaron a desplegar el mayor dispositivo de combate de incendios que se haya movilizado nunca en Portugal, según datos del Ejecutivo luso, con 37.700 efectivos, más de 10.000 medios terrestres y 8.757 descargas aéreas.
Durante esa ola de incendios se registraron 184 víctimas, entre ellas siete fallecidos (cuatro bomberos y tres civiles) y más de una decena de heridos graves.
Las autoridades no cuentan como víctimas a dos civiles que fallecieron esos días de forma "súbita" en localidades afectadas por las llamas.
Ante el daño causado por los incendios forestales, que afectó también a viviendas, negocios y campos agrícolas, el Ejecutivo de Montenegro declaró la situación de "calamidad" en los municipios afectados.
La situación de calamidad es una figura legal que en Portugal se puede aplicar en catástrofes de gran dimensión para adoptar medidas de carácter excepcional destinadas a prevenir, actuar o reponer la normalidad.EFE