Miami, 30 sep (EFE).- Los demócratas interpusieron este lunes una demanda contra la regla aprobada este mes por la Junta Electoral de Georgia que establece el conteo manual de votos en este estado, el cual será clave en las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre.
La querella, entablada por el Partido Nacional Demócrata (DNC, en inglés) y la filial estatal de este partido, alega que la medida aprobada el pasado 20 de septiembre propiciará el "caos" y tardanzas en la difusión de los resultados, además de poner en riesgo las cartillas de votación.
Como recoge el diario The New York Times, la demanda ingresada en un tribunal del condado de Fulton tiene por objetivo "proteger la santidad de las leyes estatales y evitar el caos la noche de las elecciones", en las que se enfrentarán el exmandatario Donald Trump y la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris.
Agrega el escrito que la controvertida medida excede las facultades de la junta electoral estatal, la cual desde mayo pasado cuenta con una mayoría de miembros partidarios del actual candidato republicano en las próximas elecciones generales, el expresidente Donald Trump (2017-2021).
La medida, aprobada con tres votos a favor y dos en contra, y a pesar de la opinión en contra del fiscal estatal y de expertos legales, establece que los funcionarios electorales locales deberán contar a mano los votos una vez cerrados los centros de votación y en adición a la contabilidad automatizada.
Antes de que la junta electoral estatal sometiera a votación la nueva reglamentación, la oficina del secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, mostró su oposición y entre otras cosas hizo hincapié en que la fecha de las elecciones era muy próxima como para aplicar semejantes cambios al proceso electoral.
Por su parte, la oficina del fiscal estatal, el republicano Chris Carr, alertó antes de la votación de que esta medida probablemente no sea legal. "Estas reglas propuestas no están sujetas a ningún estatuto y, por lo tanto, probablemente sean el tipo preciso de legislación inadmisible que las agencias no pueden hacer", escribió su oficina.
La medida es la más reciente de una serie de normativas aprobadas en los últimos meses por esta Junta Electoral Estatal, que en aras de mayor seguridad y transparencia el pasado mes otorgó a los funcionarios locales nuevos poderes para certificar las elecciones, normativa que también es motivo de otra demanda judicial.
En las elecciones presidenciales de 2020, en las que Trump perdió la reelección frente al actual mandatario estadounidense, el demócrata Joe Biden, el republicano no reconoció los resultados tras acusar sin pruebas de que se había cometido un fraude, incluido en Georgia, una aseveración que mantiene hasta hoy.
El expresidente afronta incluso un juicio por presunta interferencia electoral en este estado. EFE