El descornado de rinocerontes reduce un 80 % su caza furtiva en un parque de Sudáfrica

Johannesburgo, 19 sep (EFE).- Un programa para cortar los cuernos de rinocerontes ha permitido reducir en un 80 % la caza furtiva de estos paquidermos desde el pasado mes de abril en el parque Hluhluwe iMfolozi, en el este de Sudáfrica, confirmó a EFE este jueves el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, en inglés), que apoya el proyecto.

La agencia de conservación de la provincia de KwaZulu-Natal, KZN Wildlife, puso en marcha el programa en abril con el apoyo del WWF y otras organizaciones frente a las altas tasas de furtivismo registradas en la zona.

Hasta el momento, WWF calcula que el proyecto ha salvado la vida de unos 120 rinocerontes y ha permitido el rescate de ocho crías cuyas madres habían sido asesinadas.

"Lamentablemente los cazadores furtivos de rinocerontes son indiscriminados y a menudo atacan a las hembras que tienen crías pequeñas (...) Estas crías suelen ser ignoradas por los cazadores furtivos y abandonadas a su suerte", dijo en declaraciones remitidas a EFE Jeff Cooke, director del Programa de Conservación de Rinocerontes de WWF en Sudáfrica.

"Por suerte para estas ocho crías, fueron descubiertas a tiempo gracias a la extensa vigilancia aérea llevada a cabo durante la operación de descornado", añadió Cooke.

KwaZulu-Natal registró en 2023 la muerte de 325 rinocerontes, de los cuales 317 fueron cazados en Hluhluwe iMfolozi, lo que representa más del 10 % de la población total de estos paquidermos en el parque y alrededor del 60 % de la caza furtiva de este animal registrada en todo el país.

Hluhluwe iMfolozi es conocido como un lugar de nacimiento tanto de rinocerontes blancos como de rinocerontes negros en Sudáfrica y ha proporcionado animales para repoblar otras zonas del país.

Según las autoridades del parque, solo cuatro rinocerontes fueron cazados en junio, ocho en julio y otros cuatro en agosto, mientras antes del inicio del programa alrededor de treinta perdían la vida mensualmente.

Hasta el momento, se han cortado los cuernos de más de 1.000 paquidermos en el marco del proyecto, que también ha supuesto el fortalecimiento de la seguridad en el parque con la instalación de más cámaras y el uso de perros rastreadores, entre otros.

Asimismo, a muchos de los rinocerontes descornados se les han instalado dispositivos de seguimiento para monitorizar sus movimientos y también se han podido recopilar muchos datos que serán útiles para la investigación científica sobre los rinocerontes.

"Aunque hemos visto una disminución drástica de la caza furtiva en este parque emblemático, no podemos bajar la guardia. Sabemos que los grupos criminales siempre buscan sacar provecho de las fallas de seguridad donde sea que las encuentren", alertó Cook, sin embargo.

En 2023 Sudáfrica detectó un aumento de rinocerontes cazados furtivamente en el país, 499 en total, lo que supuso un aumento de 51 respecto al año anterior.

La caza furtiva -impulsada por la alta demanda de los cuernos de rinocerontes, sobre todo, en China y algunos países del sudeste asiático- ha llevado al borde de extinción a estos animales.

Sin embargo, las poblaciones tanto de rinocerontes negros como de rinocerontes blancos están creciendo por primera vez en la última década en África después de haber sido diezmadas por esa caza ilegal y la pérdida de sus hábitats, según el último estudio de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), publicado el pasado septiembre.

De acuerdo con la UICN, a finales de 2022 había 23.290 rinocerontes -incluidos 6.490 rinocerontes negros- en todo el continente, un 5,2 % más que en 2021, pese a que murieron al menos 561 a manos de los cazadores furtivos. EFE

mm/lbg/crf