Israel dice que centra su foco en el frente norte con Líbano y habla de una "nueva fase" de la guerra

El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, ha insistido una vez más en que "el centro de gravedad" de sus operaciones se sitúa cada vez más en la frontera norte, y ha hablado de una "nueva fase" de la guerra, aunque sin pronunciarse sobre las explosiones de dispositivos de comunicación en Líbano en los últimos días. "El centro de gravedad se mueve hacia el norte. Estamos desviando fuerzas, recursos y energía hacia el norte", ha manifestado Gallant durante una visita al personal de la Fuerza Aérea israelí en la base de Ramat David, a unos 40 kilómetros de la frontera con Líbano, según recoge 'The Times of Israel'. "Creo que estamos al inicio de una nueva fase en esta guerra, y necesitamos adaptarnos. Necesitamos tener consistencia en el tiempo, esta guerra requiere un gran coraje, determinación y perseverancia", ha añadido el ministro Gallant, sobre quien en los últimos días han crecido los rumores ante una posible destitución. Sobre los objetivos israelíes en el norte, Gallant ha señalado que son "claros y simples", y ha apuntado directamente al regreso seguro de los miles de civiles evacuados por los ataques del partido-milicia chií libanés Hezbolá a través de la frontera. Aunque en la jornada de este miércoles se ha conocido que la 98ªDivisión de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ha sido desplegada en el norte tras combatir en la Franja de Gaza, Gallant ha aseverado que las autoridades israelíes no se olvidan de los rehenes capturados por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ni de la situación en el sur. "No nos hemos olvidado de los rehenes y no nos hemos olvidados de nuestras tareas en el sur. Este es nuestro deber y estamos cumpliendo al mismo tiempo", ha remachado el ministro de Defensa. NETANYAHU ASEGURA EL REGRESO DE LOS CIVILES EVACUADOS EN EL NORTE Por otro lado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha aprovechado la ocasión para publicar un breve vídeo en sus redes sociales en el que asevera que su Gobierno se asegurará de que los civiles evacuados en el norte del país regresen a sus hogares. "Ya he dicho que devolveremos a los residentes del norte sanos y salvos a sus hogares y eso es exactamente lo que haremos", ha manifestado el primer ministro Netanyahu. En este contexto, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Herzi Halevi, también de visita a un comando del norte del país, ha aseverado que el Ejército está decidido a "crear las condiciones de seguridad" para el regreso de los civiles evacuados del norte. "Estamos dispuestos a hacer lo que sea necesario", ha señalado. Por otro lado, el teniente general Halevi ha asegurado que las FDI cuentan con capacidades militares de las que aún no se ha hecho uso y ha vaticinado que Israel está "muy bien preparado y prepara estos planes para el futuro". "La regla es que cada vez que llegamos a una determinada etapa, ya nos hemos preparado para avanzar con fuerza en los dos pasos siguiente. En cada una de estas etapas, el coste para Hezbolá debería ser alto", ha remachado el jefe del Estado Mayor del Ejército de Israel. Estas declaraciones de las autoridades israelíes se producen después de que tanto el martes como este miércoles se hayan registrado explosiones coordinadas de dispositivos de comunicación en Líbano, presumiblemente en manos de miembros de Hezbolá. Ambos incidentes suman ya un balance de al menos 21 muertos y en torno a 3.100 heridos. Tanto el Gobierno de Líbano como Hezbolá han denunciado que el incidente ha sido obra de Israel y han prometido una respuesta, si bien las autoridades israelíes no se han pronunciado aún al respecto de lo ocurrido. Otros países y organizaciones aliadas de Líbano y Hezbolá --como Irán, los hutíes de Yemen o las milicias palestinas-- se han pronunciado en los mismos términos. Las históricas tensiones entre Líbano e Israel repuntaron hace prácticamente un año después de que el Ejército israelí lanzara una cruenta campaña militar contra la Franja de Gaza --que se cobra ya más de 41.200 vidas palestinas-- en respuesta a los ataques previos del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), que dejaron casi 1.200 muertos y 240 rehenes. Tras aquellos ataques de Hamás y la consiguiente respuesta israelí, algunos socios de la milicia palestina en la región --como Hezbolá, los rebeldes hutíes de Yemen o el régimen iraní-- han lanzado ataques contra territorio israelí o al menos han tratado de afectar a sus intereses. Los enfrentamientos en la frontera entre Israel y Líbano dejan más de medio millar de muertos.