Hiromi Yoneda, el corazón fuerte que tiene a Japón cerca de la final

Medellín (Colombia), 18 sep (EFE).- Transformó la frustración en júbilo. Hiromi Yoneda, diez días después de haberse llenado de incertidumbre por cuenta de una lesión que puso a tambalear sus sueños, se convirtió en la heroína de Japón al convertir el gol que lo instaló en la semifinal del Mundial Femenino Sub-20 de Colombia.

"Me sentí frustrada", expresó la defensora de 19 años, quien debió ser sustituida por su compañera Raika Okamura en el segundo partido de la fase de grupos, apenas al minuto 26 por una molestia física.

La jugadora del Cerezo Osaka Yanmar Ladies tuvo que vivir desde el banco los partidos con Austria, en la última jornada de la primera fase, y frente a Nigeria por los octavos de final. Gracias al trabajo de los médicos y al apoyo de sus compañeras, pudo reaparecer el domingo ante España para definir en la prórroga el clásico moderno del fútbol femenino.

"Me decepcionó la lesión en el segundo partido contra Ghana, pero ahora estoy aquí gracias a los compañeros que han ayudado a hacer avanzar al equipo", sostuvo Yoneda, determinante en esa pelota quieta cobrada por Rio Sasaki.

En lugar de nublarse por la euforia del triunfo ante las actuales campeonas del mundo en la categoría, la dueña del dorsal 4 en Japón mostró gratitud por su recuperación: "quiero agradecer al personal médico, estoy parada aquí por ellos".

Y luego agregó que jugó el partido frente a las ibéricas con "un corazón fuerte".

Ahora, con "más confianza" después de vencer a España, para saldar las cuentas del mundial pasado, Yoneda se alista para el juego de este miércoles ante Países Bajos, al que enfrentarán con la ilusión de poner a Japón en su tercera final consecutiva.

"Queremos ganar el próximo partido jugando nuestro propio fútbol. Quiero ganar", finalizó la defensora. EFE

jps/jga/car/arh