Islas Galápagos (Ecuador) 13 sep (EFE).- Solo tres de cada diez ecuatorianos tienen acceso a crédito, una situación "crítica", según Valeria Llerena, directora ejecutiva de la Red de Instituciones Financieras de Desarrollo (RFD), lo que ubica a Ecuador en niveles bajos de inclusión financiera con relación a la región.
Apuntó que el 73 % de ecuatorianos accede "a algún producto financiero", pero solo el 30 %, a algún crédito de cualquier tipo orientado a personas naturales.
"Estamos por debajo de los países vecinos en temas de inclusión financiera, considerando que Latinoamérica está por debajo de otros países desarrollados" de Europa, dijo en entrevista con EFE en el marco del vigésimo cuarto Foro Ecuatoriano de Inclusión Financiera, organizado por la RFD, donde se abordan asuntos que afectan a toda América Latina, y se analiza los desafíos del sector y la sostenibilidad.
En el encuentro -que reúne a 300 personas del sector, autoridades y representantes de organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) - se analizan las perspectivas económicas de Ecuador, temas de seguridad y mejores prácticas de supervisión financiera frente a los desafíos actuales, entre otros.
Un 3.000 % de interés anual
Llerena mostró su preocupación por la "alta informalidad en la economía" con muchos ecuatorianos accediendo a crédito informal, con tasas "que llegan hasta el 2.500 o 3.000 % anual", dijo.
Esto no implica solo costos financieros sino sociales -anotó- al mencionar asuntos de inseguridad, amenazas y riesgos, por lo que insistió en la importancia de un trabajo en conjunto para informar a la población, establecer marcos regulatorios y facilitar el acceso a créditos formales a diversos sectores.
"Acceder a un crédito de forma correcta, con un análisis de capacidad de pago adecuado y que esté dentro de la parte formal, es algo fundamental en la vida de las personas" y el crecimiento de la economía, recalcó.
Aplaudió la decisión del Gobierno ecuatoriano, presidido por el empresario Daniel Noboa, de transversalizar la educación financiera en la malla curricular de los colegios y recalcó que en el proceso de cambio deben participar todos los frentes, como la población y entidades financieras y gubernamentales, entre otros.
Y por ello destacó reuniones como la que se desarrolla en el archipiélago de Galápagos, que termina este viernes, y en la que se analizan las dificultades del sector, se comparten experiencias y se buscan soluciones teniendo también en cuenta los avances de la tecnología.
Problemas económicos
En el foro, que se realiza anualmente desde hace veinticuatro años, analizan las dificultades coyunturales que afectan al sector, como el hecho de que la población esté "sumamente golpeada" en su economía pues -dijo- "no tiene los ingresos que tenía previo a la pandemia, no se han recuperado los niveles de empleo".
Además, hay "una situación de seguridad crítica; hay cantones y zonas puntuales en donde las entidades financieras no pueden entrar por el nivel de riesgo que tienen", indicó.
Y a esto se suma la incertidumbre política, pues Ecuador volverá a tener elecciones generales, comentó antes de recordar también la importancia de tener un sistema regulatorio propositivo en el sector financiero.
Dicho sector es un pilar que "permite que la economía crezca porque multiplica el dinero en la economía", genera consumo, que a su vez alienta la producción y ésta, el crecimiento, resumió.
La representante de la RFD -una organización sin fines de lucro que agrupa a 57 instituciones financieras entre bancos, cooperativas y organizaciones no gubernamentales- consideró que, aunque el sistema financiero ecuatoriano está "golpeado" por los mencionados factores externos, y con una cartera de morosidad que ha crecido en los últimos tiempos, se mantiene "muy sólido y muy líquido".