Jerusalén, 10 sep (EFE).- Hamás negó este martes que hubiera milicianos en el área de la zona humanitaria de Jan Yunis -sur de Gaza- bombardeada esta madrugada por Israel causando al menos 40 muertos, y donde el Ejército alegó haber atacado operativos de la organización islamista.
"Confirmamos que las acusaciones del Ejército de ocupación fascista de que hay miembros de la resistencia en el lugar del ataque es una mentira descarada, con la que busca justificar estos crímenes atroces", aseguró Hamás en un comunicado.
Esta madrugada, el Ejército confirmó el ataque y lo definió como una operación conjunta con el servicio de inteligencia interior israelí -el Shin Bet- dirigido contra "importantes terroristas de Hamás" que operaban desde un supuesto centro de control incrustado en la zona humanitaria de Jan Yunis.
El Ejército no aportó pruebas al respecto, pero detalló a EFE que el ataque se produjo entre las 00:30 y la 1:30 hora local (21:30 a 22:30 GMT).
El bombardeo impactó contra una veintena de tiendas de campaña en las que dormían desplazados cerca de la mezquita de Ozman bin Affan, detrás del Hospital Británico que se encuentra en el suroeste de la ciudad.
"La explosión creó un gran cráter y un incendio. Los cuerpos y las tiendas de campaña se mezclaron en la arena y hay varias personas desaparecidas", relataron los servicios de Defensa Civil del enclave, que hablan de lo sucedido como una "horrible masacre" y siguen buscando cuerpos.
En las imágenes difundidas por estos equipos de rescate se observa a sus trabajadores excavando entre la arena de la playa para tratar de extraer cadáveres o supervivientes.
El portavoz de la Defensa Civil gazatí, Mahmud Basal, dijo esta madrugada que "familias enteras han desaparecido entre la arena" del campamento.
Un 90 % de la población de Gaza -de más de 2 millones de personas- se encuentra en este momento desplazada, y casi la totalidad de los evacuados se hacinan en esta "zona humanitaria" designada por el Ejército, que abarca un 14 % del centro y sur de la Franja en áreas de Mawasi, Jan Yunis y Deir al Balah.
Testigos del ataque aseguraron a los servicios de Defensa Civil que Israel disparó cinco misiles pesados contra las tiendas de los desplazados en la zona costera.
Su portavoz, Basal, añadió además que en el lugar de la masacre se han hallado tres cráteres de gran profundidad. Las Fuerzas Armadas dijeron a EFE no poder confirmar el uso de cinco misiles en el bombardeo, pero tampoco lo desmintieron.
Desde el inicio de la guerra en Gaza el pasado octubre, cerca de 41.000 palestinos han muerto y más de 94.800 han resultado heridos a causa de los incesantes ataques israelíes, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad del enclave, gobernado por Hamás.