El mundo necesita 44 millones de profesores para que la primaria y secundaria sea gratuita en 2030, según Entreculturas

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El mundo necesita 44 millones de profesores de aquí a 2030 para alcanzar las metas educativas de desarrollo sostenible, según 'Educación rural, entre el olvido y la reivindicación', el nuevo informe que Entreculturas presenta este martes 10 de septiembre. Estas metas incluyen conseguir que la educación primaria y secundaria sea gratuita para todos los niños, proporcionar igualdad de acceso a una formación profesional asequible, eliminar las disparidades de género y riqueza y lograr el acceso universal a una educación superior de calidad. De esos 44 millones de nuevos docentes, un total de 13 millones tendrían que ser de primaria, mientras que los restantes 31 millones tendrían que ser de secundaria. Sólo en América Latina y el Caribe, hará falta un 70% más de docentes en 2040 que en 2017. El estudio, que Entreculturas presenta a través de la campaña La Silla Roja y bajo el lema 'Pongamos la educación en el mapa', también ha explicado que hay 72 millones de niños fuera de la escuela y que, en países de renta baja, sólo uno de cada cinco niños recibe algún tipo de educación preescolar. Además, ha detallado que 168 millones de niños y adolescentes se ven obligados a realizar trabajo infantil y que un 83% de los que trabajan y que tienen entre cinco y once años lo hacen en el sector agrícola. A lo largo del texto, Entreculturas ha incidido en la brecha entre el entorno rural y el urbano, así como en las diferencias entre hombres y mujeres. De esta manera, ha indicado que, en zonas rurales, sólo el 11% de las niñas empobrecidas finaliza la educación secundaria. Entre los adultos, hay 773 millones de personas no saben ni leer ni escribir y dos tercios de ellos (es decir, 515 millones) son mujeres. Con datos de 2023 y 2024 de Unesco, Unicef, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglás en inglés) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el estudio también ha reflejado las diferencias entre el entorno rural y el urbano en cuanto al impacto que tuvo la pandemia de COVID-19 así como el que tiene el acceso a Internet en general. Así, Entreculturas ha indicado que la pandemia amplió las brechas de desigualdad para la población en el ámbito rural por la falta de conectividad y cobertura tanto telefónica como de internet (de un 24% en zonas rurales frente al 60% en zonas urbanas en el caso del continente africano) y afectó a la calidad de la educación y a la salud mental de estudiantado y docentes a nivel mundial. Sobre Internet, la ONG ha añadido que 244 millones de personas no tienen acceso a Internet y que 435 millones tienen una conexión precaria. En los espacios rurales, sólo el 25% de los adultos saben encontrar, descargar, instalar y configurar programas informáticos. SISTEMAS DE CUPOS Y CLASES PARA MUJERES ADULTAS En líneas generales, la ONG ha insistido a los países a facilitar que las comunidades rurales tengan oportunidades educativas desde la primera infancia hasta las personas adultas, sin discriminación. Para ello, considera que las Administraciones tienen que implementar políticas públicas concretas, que incluyan la financiación adecuada, la formación docente y el establecimiento de programas y centros educativos adecuados para los diferentes entornos. Así, propone medidas como establecer sistemas de cupos para estudiantes rurales en las instituciones educativas nacionales con capacidad restringida o implementar programas de educación de personas adultas, con especial consideración de los derechos y necesidades específicas de las mujeres, entre otras propuestas. Por último, la ONG ha pedido respetar los conocimientos previos, las prácticas ancestrales de enseñanza y aprendizaje, los líderes y lideresas tradicionales y el patrimonio cultural inmaterial de las comunidades rurales.

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