El presidente del partido francés de extrema derecha Agrupación Nacional, Jordan Bardella, ha asegurado este sábado que quiere hacer una "oposición constructiva" al futuro Gobierno del conservador Michel Barnier. "Simplemente espero que, a diferencia de la izquierda, Agrupación Nacional no participe en el desorden institucional y el caos democrático", ha explicado durante una entrevista con la cadena de televisión francesa TF1. Estas palabras se producen poco después de que miles de personas hayan secundado este sábado las 150 convocatorias de manifestación en toda Francia para protestar por el nombramiento del conservador Michel Barnier como primer ministro a pesar de la victoria de la izquierda en las últimas elecciones legislativas. La líder del partido, Marine Le Pen, ha confirmado este jueves que no censurarán a Barnier sin haber escuchado su programa político que presentará ante la Asamblea Nacional. En este sentido, Bardella ha declarado que "si Barnier desea ser la voz y el conductor de las inspiraciones democráticas que se expresaron en las elecciones legislativas, entonces le juzgaré en función de las pruebas". Pese a ello, el presidente de Agrupación Nacional ha advertido que si el nuevo primer ministro "sigue la política que ha llevado Emmanuel Macron (...) entonces este Gobierno caerá". Bardella ha negado haber recibido "garantías" de Barnier a cambio de apoyo tras su discurso ante la Asamblea Nacional. "No ha habido conversaciones directas con Michel Barnier", ha declarado, al tiempo que ha asegurado tener "exigencias" en materia de poder adquisitivo, seguridad e inmigración. En esta línea, al ser preguntado por la posición del partido en lo referente a una posible reforma de las pensiones, Bardella ha dicho que está "a la espera de lo que tenga que decir el nuevo primer ministro". "Si las preocupaciones que tenemos no aparecen en su discurso, nos reservaremos el derecho a censurar al Gobierno (...) Esta reforma de las pensiones es injusta, por lo que seguiremos defendiendo en la Asamblea Nacional un inicio mucho más temprano", ha señalado en alusión a la polémica ley de pensiones de Emmanuel Macron que suscitó fuertes protestas en Francia durante el año pasado.