Macron sigue sondeando nombres para un primer ministro con responsables políticos

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París, 3 sep (EFE).- El presidente francés, Emmanuel Macron, continúa este martes sondeando por teléfono con responsables políticos algunos de los nombres que más han sonado en los últimos días para el puesto de primer ministro, en particular el del conservador Xavier Bertrand.

Mientras el Elíseo se ha mantenido oficialmente mudo sobre las conversaciones de Macron para intentar salir del atolladero político en que está sumido el país tras las elecciones anticipadas del 30 de junio y 7 de julio que él convocó, la prensa se ha convertido en un bullidero de filtraciones y especulaciones.

Le Parisien ha contado que esta mañana el jefe del Estado ha estado hablando por teléfono con tres de los pesos pesados de Los Republicanos, el partido de la derecha tradicional, Gérard Larcher, Laurent Wauquiez y Bruno Retailleau, sobre la pista de Bertrand, antiguo ministro y actual presidente de la región de Altos de Francia (norte).

Pero estos dirigentes han puesto dos condiciones para dar su apoyo al que fue miembro de su formación: que se haga una evaluación del riesgo de que un Gobierno de Bertrand sea tumbado por una moción de censura y que el nuevo primer ministro asuma el pacto legislativo que presentó LR.

Los diputados y los senadores de Los Republicanos (LR) han convocado sendas reuniones este martes para analizar un potencial escenario con Bertrand, que el lunes fue recibido por Macron en el Palacio del Elíseo al igual que el exprimer ministro socialista Bernard Cazeneuve, otro de los nombres que más suena.

Por parte de la extrema derecha, la Agrupación Nacional (RN), ha advertido por medio del entorno de su presidente, Jordan Bardella, que censurará a cualquiera de los tres nombres que más siguen sonando como posibles primeros ministros, Bertrand, Cazeneuve y Beaudet.

Este último, presidente del Consejo Económico, Social y Medioambiental (CESE), sin experiencia política y un perfecto desconocido para la inmensa mayoría de los franceses, aparece como una potencial solución para un Gobierno técnico que trataría de salvar la fragmentación inédita de la Asamblea Nacional (cámara baja) desde las elecciones legislativas anticipadas.

El RN, que aunque con sus socios fue el primer bloque político con el 37 % de los votos en la segunda vuelta de las legislativas, se vio penalizado por la estrategia del llamado 'cordón sanitario' y sólo obtuvo 142 diputados en una Asamblea Nacional de 577 escaños.

El Nuevo Frente Popular (NFP) que aglutina a los partidos de izquierda, ha continuado denunciando la actitud del presidente francés, que se niega a nombrar a la que es su candidata a primera ministra, Lucie Castets.

Las formaciones de izquierdas consideran legítima su exigencia de que Castets encabece el próximo Ejecutivo porque en conjunto constituyen la primera fuerza en la cámara baja, aunque con 193 diputados están muy lejos de los 289 de la mayoría abstoluta.

Mientras tanto, una petición auspiciada por La Francia Insumisa (LFI), el partido de Jean-Luc Mélenchon, para la destitución de Macron, en la que se acusa de no reconocer los resultados de las legislativas y de estar bloqueando la aplicación de cualquier programa que no sea el suyo, ha recibido cerca de 200.000 firmas. EFE

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