Jerusalén, 3 sep (EFE).- El exministro israelí Benny Gantz, quien abandonó el Gobierno en junio por desavenencias sobre la guerra en Gaza, culpó este martes al primer ministro, Benjamín Netanyahu, de haber "retrasado continuamente" un acuerdo para la liberación de rehenes.
En un discurso televisado, en el que también participó el miembro de su partido Gadi Eisenkot, Gantz aseguró que Netanyahu no dice la verdad cuando promete que traerá a los rehenes con vida; de los que aún quedan 97 cautivos en la Franja, de los que al menos 33 se dan por muertos.
"Netanyahu ha retrasado continuamente los acuerdos para liberar a los rehenes", acusó Gantz, en alusión a las cláusulas que el mandatario israelí incluyó en los últimos borradores, entre ellas, que la frontera gazatí con Egipto -el denominado corredor de Filadelfia- debe permanecer bajo dominio israelí.
“La cuestión no es (el corredor de) Filadelfia”, afirmó Gantz, quien también ejerció como jefe del Estado Mayor del Ejército, “sino la falta de verdaderas decisiones estratégicas”.
"(Esto) no me sorprende porque Netanyahu está centrado en la supervivencia política y daña nuestros vínculos estratégicos con Estados Unidos, mientras Irán avanza hacia un arma nuclear”, afirmó en el discurso. “Debemos traer de vuelta a los rehenes”, instó, “aunque sea a un precio muy alto”.
De forma simultánea, la Oficina de Netanyahu publicó un breve comunicado de respuesta, en el que alegó que "la realidad habla por si sola" y le pidió al miembro opositor que si no va a contribuir "en la victoria y el regreso" de los rehenes, que mejor no interfiera.
"Desde que Gantz y su partido dimitieron del Gobierno, Israel eliminó al jefe de Estado Mayor de Hamás y al jefe de Estado Mayor de Hezbolá, atacó a los hutíes, capturó el eje de Filadelfia -el oleoducto de armamento de Hamás- y llevó a cabo un ataque preventivo contra Hizbulá que frustró su malicioso plan y destruyó miles de cohetes dirigidos a Galilea", enumera el texto como logros.
"Quien no contribuya a la victoria y al regreso de nuestros rehenes, es mejor que no interfiera", concluyó el texto en tono de advertencia.