Quito, 2 sep (EFE).- El Gobierno de Ecuador condenó este lunes el asesinato de seis rehenes israelíes en Gaza que habían sido secuestrados durante el ataque terrosita del grupo islamista Hamás acontecido el pasado 7 de octubre de 2023, lo que calificó como "una grave violación de los derechos humanos y del derecho internacional".
En un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, el Gobierno ecuatoriano extendió sus condolencias a las familias de las víctimas.
El hallazgo de los cuerpos de estos seis rehenes ha causado una gran conmoción en Israel, con protestas masivas en la noche del domingo en diferentes ciudades israelíes y la convocatoria este lunes de la primera huelga general a favor de un acuerdo de tregua.
Según el Ministerio de Sanidad israelí y las autopsias, los seis fueron asesinados a corta distancia "entre 48 y 72 horas" antes de que los encontraran los soldados. El Ejército culpa a Hamás de ejecutarlos.
En la noche del domingo, unos 300.000 israelíes, al igual que hacen desde hace meses los familiares de los rehenes, le reprocharon en las calles a Netanyahu que no haya priorizado la firma de un acuerdo.
En casi once meses de combates solo hubo uno, en noviembre, que permitió el regreso a casa de 105 rehenes.
Ahora, de los 251 secuestrados el 7 de octubre, quedan en la Franja 97 cautivos -al menos 33 confirmados muertos, según el Ejército-, mientras que hay otros cuatro rehenes desde hace años, de ellos dos soldados muertos.
En su comunicado, el Ejecutivo ecuatoriano señaló que aspira a la liberación del resto de rehenes que aún permanecen en la Franja de Gaza bajo custodia de Hamás.
Asimismo, la administración del presidente de Ecuador, Daniel Noboa, hizo un llamamiento a todas las partes involucradas en el conflicto "a cesar toda hostilidad y a buscar un acuerdo de paz mediante el diálogo".
"Es imperativo que se establezca un cese al fuego que permita la resolución pacífica y duradera del conflicto", concluyó.
La embajadora de Ecuador en Israel es la vicepresidenta Verónica Abad, a quien Noboa envió a Tel Aviv con la misión de buscar la paz entre israelíes y palestinos, dentro de un enfrentamiento abierto entre ambos que se inició durante la campaña electoral de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales extraordinarias de 2023.