Belgrado, 28 ago (EFE).- El presidente de Francia, Emmanuel Macron, iniciará este jueves una visita oficial de dos días a Belgrado, donde se reunirá con su homólogo serbio, Aleksandar Vucic, para fortalecer las relaciones bilaterales y la cooperación energética y en defensa entre ambos países.
Según adelantó la televisión pública serbia RTS, entre los temas centrales en la agenda estarán el apoyo de Francia a la transición energética de Serbia y el interés de Belgrado por adquirir aviones militares franceses Rafale.
Aunque aún no se ha confirmado la firma de contratos durante la visita, el diario Politika recuerda que Vucic avanzó esta semana que se está trabajando en acuerdos con compañías francesas de energía eléctrica.
En cuanto a la adquisición de los aviones de combate, el líder serbio ha reiterado en varias ocasiones que la adquisición supondría un coste de unos 3.000 millones de euros.
La cooperación científica será otro punto clave en el encuentro, especialmente en el campo de la inteligencia artificial, según informó la ministra serbia de Ciencia y Desarrollo Tecnológico, Jelena Begovic.
Los presidentes también abordarán el proceso de normalización de las relaciones entre Serbia y Kosovo, que en 2008 declaró de forma unilateral su independencia, que Belgrado sigue sin reconocer.
Bajo mediación de la Unión Europea (UE) desde 2011, Francia y Alemania presentaron el año pasado un nuevo plan para normalizar las relaciones, hasta ahora con una escasa aplicación entre las partes.
Macron y Vucic también participarán este viernes en la ciudad norteña de Novi Sad en un foro sobre jóvenes e inteligencia artificial, y asistirán a la ceremonia de finalización de la modernización del aeropuerto de Belgrado, gestionada por la compañía francesa Vinci desde 2018.
Esta es la segunda visita de Macron a Serbia en cinco años, tras la visita oficial del presidente serbio a Francia en abril de este año.
Serbia, con una población de unos 6,7 millones de habitantes, es candidato al ingreso en la UE, que el país balcánico define de interés estratégico.
Al mismo tiempo, mantiene buenas relaciones con China y Rusia, y aunque ha reconocido la integridad territorial de Ucrania, no se ha sumado a las sanciones occidentales a Moscú. EFE
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