París, 27 ago (EFE).- Varios partidos franceses de izquierda no acudirán a la nueva ronda de consultas que anunció para este martes el presidente Emmanuel Macron, después de que éste rechazó nombrar primera ministra a su candidata, Lucie Castets.
Socialistas y ecologistas avanzaron hoy su rechazo a participar en las consultas, lo que se une al plan del Elíseo a no convocar al más radical La Francia Insumisa (LFI).
"Rechazo ser cómplice de una parodia de la democracia", afirmó esta mañana el primer secretario del Partido Socialista, Olivier Faure, en una entrevista en el canal France 2.
"Lo que pasa en realidad (.,.) es que (Macron) lo que no quiere que se aplique el programa del Nuevo Frente Popular, que deroguemos la reforma de las pensiones" del año pasado, añadió.
Faure consideró que el rechazo de Macron de nombrar una primera ministra del bloque político que logró más escaños en las recientes elecciones legislativas supone "un problema democrático".
La secretaria general del partido ecologista EELV, Marine Tondelier, acusó a Macron de emprender "una deriva iliberal" por rechazar dar las llaves del Gobierno al bloque político con más escaños en la Asamblea Nacional.
Tondelier anunció que convocarán "movilizaciones" de protesta, aunque recalcó que serán "pacíficas", según dijo a la radio pública FranceInfo.
La propia Castets reconoció un sentimiento de "enfado", porque el presidente convocó elecciones anticipadas "sin consultar, algo que nadie comprendió", y más de un mes después "dice a los franceses que que no sirvió para nada, que han votado mal", según dijo en la emisora FranceInter.
El Elíseo anunció a última hora de la tarde del lunes que, tras el final de las consultas políticas con los responsables de los principales partidos parlamentarios, Macron no nombraría a Castets y reanudaría las reuniones con las formaciones.
Sin embargo, fuentes del Elíseo precisaron que ni LFI y la ultraderecha de Marine Le Pen y sus aliados -considerados como fuera del arco republicano- serían invitados a la nueva ronda.
Uno de los principales aliados de Macron, el líder del partido centrista MoDem, François Bayrou, aseguró de que la situación actual "no es un bloqueo completo".
Bayrou justificó el rechazo de Macron a una primera ministra de la izquierda en que, según el campo presidencial, el programa de la coalición NFP es en realidad el de LFI.