Sídney (Australia), 22 ago (EFE).- Al menos diez vuelos fueron cancelados la mañana del jueves en dos aeropuertos de Nueva Zelanda debido a la presencia nubes de ceniza volcánica procedentes del volcán Whakaari, cuya erupción en 2019 causó la muerte de 22 personas.
Las fotografías captadas por la agencia gubernamental científica neozelandesa GNS Science muestran una inmensa columna de humo que sale del Whakaari -también conocido con White y situado a 48 kilómetros de la ciudad de Whakatane (noreste del país oceánico)- en medio de un manto de ceniza volcánica que impide la visibilidad.
La poca visibilidad causada por la presencia de esta ceniza volcánica en las rutas de vuelo en los aeropuertos de Tauranga y Rotorua provocó la cancelación de al menos diez vuelos y tres retrasos en estas terminales aéreas de la zona septentrional de la Isla Norte, según informó la emisora Radio New Zealand.
Tras mejorar la visibilidad, el tráfico aéreo en Tauranga y Rotorua se reanudó antes del mediodía, de acuerdo al medio público neozelandés.
El GNS Science vigila la actividad del Whakaari, con nivel 3 de alerta en una escala de 5 desde el pasado 9 de agosto, ante la posibilidad de que ocurra una erupción volcánica, que incluye explosiones, expulsión de rocas, movimiento rápido de nubes calientes de cenizas, flujo de lava y gases volcánicos, corrimientos de tierra, terremotos, entre otros riesgos.
El Whakaari, uno de los volcanes más activos y turísticos de Nueva Zelanda, entró en erupción el 9 de diciembre de 2019 mientras 47 personas -la mayoría de ellas turistas- se encontraban en la isla o sus proximidades, provocando la muerte de 22 de ellas -en el lugar de la catástrofe o mientras eran tratados de las quemaduras- y heridas a otras 25.