Mbappé engrandece LaLiga

Madrid, 12 ago (EFE).- El sueño del madridismo hecho realidad. El anhelo de infancia de Kylian Mbappé. La llegada del jugador más determinante del planeta fútbol engrandece una Liga necesitada de grandes referentes. Lo será la nueva estrella del Real Madrid como Dani Olmo en un Barcelona en el que Lamine Yamal ya reina con 17 años, y una nueva delantera para soñar en el Atlético de Madrid formada por Julián Álvarez y Alexander Sorloth. Los tres grandes candidatos de un torneo apasionante.

Alejada del "low cost" generalizado de la última edición, aún a años luz del poderío económico de clubes de la 'Premier League', los equipos de LaLiga EA Sports vuelven a tener la capacidad económica de realizar contrataciones que disparan la ilusión. Con días por delante hasta que se cierre el mes de agosto y muchos equipos con los deberes por hacer en plena competición, la inversión total se acerca a los 500 millones de euros.

Nadie, desde el Valencia de Rafa Benítez en la edición 2003/04, ha sido capaz de arrebatar una Liga a los tres grandes. Lo acarició un modesto batallando entre gigantes en la pasada campaña, el Girona de Míchel. Antes la Real Sociedad de Imanol Alguacil o un Sevilla que anhela Nervión en tiempos revueltos de un presente de inestabilidad institucional y económica. El Barcelona, con once conquistas, el Real Madrid con siete y el Atlético de Madrid de Diego Simeone, que se llevó dos con mucho mérito, son los dominadores de las dos últimas décadas.

Con Carlo Ancelotti el Real Madrid traslada a LaLiga su hegemonía reciente en la Liga de Campeones. Tres de las cinco últimas ediciones ligueras se han teñido de blanco, dos con el técnico italiano que encara el reto de dar al madridismo dos Ligas consecutivas, un logro inalcanzable desde 2008. Su equipo, que da un salto de calidad con el deseado Mbappé y el joven Endrick, es el rival a batir.

En el camino perdió a su brújula, Toni Kroos, que decidió el momento de su adiós en lo más alto. Posiblemente después de la mejor temporada de su carrera y con mucho fútbol por dar a sus 34 años. Pero el Real Madrid, aún con Luka Modric como espejo en el que mirarse para su vestuario, está por encima de cualquier adiós. Una planificación diseñada por su presidente, Florentino Pérez, que le ha llevado a competir sin complejos con clubes europeos con mecanismos de financiación bien distintos.

La apuesta por jóvenes valores que ahora son realidades brillantes, instalados entre los mejores del mundo como Vinícius Junior, Rodrygo Goes, Fede Valverde o Eduardo Camavinga. Un modelo extendido con Arda Güler o Endrick. Reforzado con valores seguros. Jude Bellingham hace un año. Kylian Mbappé en el presente para convertir en viable un imposible, aspirar a los siete títulos de la temporada del Real Madrid.

Obligados a intentar boicotearlo están un Barcelona que estrena identidad con Hansi Flick al mando y el Atlético de Madrid, único club que derrotó al Real Madrid en la última Liga y le eliminó de la Copa del Rey. Además con proyectos reforzados. Desde la ingeniería económica para cuadrar números de Joan Laporta, bajando la masa salarial, obligado aún a vender algún jugador importante pero incorporando otros, como Dani Olmo, y peleando hasta el final por una perla como Nico Williams.

Y un Atlético de Madrid que tira de chequera para huir de temporadas decepcionantes como la última. Acercándose a los 200 millones de euros en gasto en fichajes de futbolistas contrastados que dan un salto de calidad a la plantilla. Robin le Normand en defensa, Conor Gallagher en el centro del campo, Julián Álvarez y Sorloth para dar forma, junto a Antoine Griezmann, a una delantera de altos vuelos.

Dos proyectos reforzados que aspiran al trono liguero. Lo alcanzó un curso Xavi Hernández con el Barcelona, incapaz de sostener la regularidad necesaria para que su imagen como técnico se acercase a la leyenda como futbolista. Su legado queda gracias a la facilidad de dar paso a jóvenes valores de la cantera, con Lamine Yamal como estandarte. Destrozando registros con 16 años. Jugando en la élite como si estuviera en su barrio en Rocafonda.

Si Flick aparece como técnico de éxito para intentar poner freno a un dominio madridista, el Atlético de Madrid sigue en las manos de Simeone, el entrenador más longevo del fútbol español, en su cargo desde finales de diciembre de 2011. Disfrutando en el presente de su persistencia en la búsqueda de gloria para el club de su corazón con un proyecto renovado con fichajes ilusionantes.

Evitar que la distancia se amplíe con el resto de clubes de LaLiga, pese a la distancia económica de los proyectos, pasa por la capacidad del Girona de mantenerse en la exigencia en un escenario en el que nunca estuvo.

Enterrado el factor sorpresa. Ganado a pulso ser equipo 'Champions' con una histórica tercera plaza el último curso que provocó que sus grandes referentes llamasen la atención de los grandes. Sin Savio, Artem Dovbyk o Aleix García, un equipo de autor con el sello de Míchel, busca asentarse en lo más alto con el regreso de Oriol Romeu y las apuestas por jóvenes valores españoles como Abel Ruiz y Bryan Gil más un futbolista con el cartel de Van de Beek.

Junto al Girona una Real Sociedad que navega en la incertidumbre, pendiente de no perder a Martin Zubimendi y Mikel Merino ante el poderío económico de clubes de la 'Premier', tras la salida de Robin Le Normand. Reforzado con Sergio Gómez y Sucic pero con la necesidad de más para que Imanol Alguacil pueda mantener el rendimiento. A la espera de más salidas, como Sadiq, para más llegadas, con el punto de mira en Borja Mayoral, máximo artillero español del último curso.

Para el Athletic Club retener a Nico Williams un año más ya es un logro. Y parece que la ilusión, tras cumplir el sueño de ganar un título con el club de su corazón, por jugar competición europea en su equipo y con su hermano Iñaki, se impone a la opción de marcharse a grandes proyectos como el del Barça o el PSG que han llamado a su puerta por una cláusula asequible de 58 millones de euros. Un bloque reforzado con Djaló y Gorosabel para que Ernesto Valverde de un paso más.

Figuras de entrenadores sobre las que se construyen proyectos. La continuidad en tiempos de poca paciencia en los banquillos. La encuentra Manuel Pellegrini en el Real Betis, en su quinta temporada, con ilusiones europeas para llegar lejos en la Liga Conferencia mientras busca dar un salto en LaLiga apostando por la experiencia de Adrián San Miguel en la portería, Ricardo Rodríguez y Diego Llorente en defensa.

También Marcelino García Toral tras impulsar la reacción de un Villarreal que parecía encaminado al abismo, batallando en peleas a los que no estaba acostumbrado en un pasado reciente repleto de gloria. Fuera de Europa, con jugadores de un perfil demandado y a la espera de más llegadas, promete luchar en otros terrenos.

Como quiere volver a repetir Luis García Plaza en un Alavés el que alejó del peligro y situó en zona media de la clasificación en el pasado campeonato, el nuevo Osasuna de Vicente Moreno con la llegada de Bryan Zaragoza, el Mallorca con el relevo en el banquillo de Javier Aguirre por Jagoba Arraste y un Sevilla asfixiado por las deudas, alejado de la realidad de la última década de disfrutar en competición europea y obligado a reinventarse en la inquietud.

Lo es para el Valencia, por mucho mérito que tuviera Rubén Baraja para hacer soñar por momentos con clasificación europea a su afición, con un proyecto repleto de juventud al que suma Dani López y Rafa Mir. A la espera de poder mantener a Javi Guerra, que estuvo traspasado al Atlético de Madrid en una operación que se cayó cuando estaba hecha.

El objetivo de la permanencia como primera piedra para soñar con más para el Getafe de José Bordalás, aún repleto de dudas en una plantilla por reforzar, el Celta de Claudio Giráldez reforzado con Ilaix Moriba o Borja Iglesias, una nueva UD Las Palmas con Luis Carrión a los mandos y hasta once fichajes para celebrar su 75 aniversario, y el Rayo Vallecano de Íñigo Pérez que mantiene su bloque para su centenario.

Y el reto de mantenerse en la élite para los tres equipos que están de vuelta con una historia a retomar en Primera división como Espanyol, Real Valladolid y Leganés, tras el siempre difícil trago de caer y lograr salir de la tan competida Segunda división.

Roberto Morales