París, 7 ago (EFE).- Emmanuel Macron advirtió este miércoles al nuevo presidente iraní, Masud Pezeshkian, que nadie, y tampoco Irán, saldría ganando con una nueva escalada militar en Oriente Medio, y le pidió retención para los "actores desestabilizadores a los que apoya" Teherán.
En una conversación telefónica que mantuvo con Pezeshkian, el presidente francés le instó a "hacer todo lo posible para evitar una nueva escalada militar que no tendría interés para nadie, tampoco para Irán, y que perjudicaría de forma duradera la estabilidad regional", informó el Elíseo.
Macron, que mostró su inquietud por "el aumento de las tensiones en la región", puso el acento en que hay que "salir de la lógica de las represalias y preservar a la población civil".
Una alusión evidente a la reacción militar de Irán contra Israel que muchos temen después del asesinato en Teherán, atribuido a los servicios secretos del Estado judío, de Ismail Haniyeh, el jefe de la milicia palestina Hamás.
Según la versión del Elíseo, el presidente francés señaló igualmente que Irán debería comprometerse a hacer un llamamiento a "los actores desestabilizadores que apoya" para que se comporten con "la mayor contención" para evitar que la situación se inflame.
A ese respecto, precisó que ese es el mismo mensaje que dirige "a todos los actores de la región con los que está en contacto" y recordó la posición francesa "en favor de un alto el fuego inmediato en Gaza y de un rechazo firme de cualquier escalada con Líbano".
Irán es el principal soporte de Hamás, pero también de la milicia libanesa Hizbulá, en confrontación directa con Israel.
Macron aseguró que su país está comprometido para "trabajar en la búsqueda de un marco político creíble, capaz de aportar paz y seguridad en la región, a condición de que Irán respete sus compromisos internacionales", añadió la sede presidencial francesa.
Se trata de una referencia al programa balístico de Teherán y sobre todo a su programa para dotarse de la bomba atómica, que le enfrenta en particular desde hace más de dos décadas a las potencias occidentales.
Irán había dado poco antes su versión de la conversación entre Macron y Pezeshkian, en la que éste aseguró que su país "nunca peremanecerá en silencio ante las violaciones de sus intereses y su seguridad", en alusión al asesinato de Haniyeh en Teherán.
El presidente iraní hizo hincapié a Macron en que con ese asesinato en territorio iraní y con sus acciones en Gaza lo que busca es "propagar el incendio en la región" y reprochó a "Estados Unidos y los países occidentales" el apoyo que le prestan "en la comisión de crímenes, genocidio y terrorismo, en lugar de condenarlo".
Para Pezeshkian, si Estados Unidos y Europea "realmente quieren evitar la guerra en la región, deberían obligar a ese régimen (Israel) a detener el genocidio y los ataques a Gaza y aceptar el alto el fuego".