La UE denuncia la destrucción por parte de Israel de infraestructuras civiles en Gaza

La Unión Europea ha denunciado este lunes la destrucción en el marco de la ofensiva de Israel contra la Franja de Gaza de las infraestructuras civiles en el enclave, complicando aún más las condiciones de vida para la población, y ha recordado que estos ataques constituyen crímenes de guerra. "La UE está seriamente preocupada por la continua destrucción de infraestructuras civiles clave, incluida una planta de tratamiento de agua en Rafá, y se une a los llamamientos internacionales para que se aclare este incidente", ha señalado el Alto Representante de la UE, Josep Borrell, en un comunicado. El jefe de la diplomacia europea subraya que los ataques a infraestructuras civiles críticas "constituyen un crimen de guerra", al tiempo que pide a todas las partes que eviten los daños a civiles, trabajadores humanitarios e infraestructuras civiles, instando al acceso pleno, rápido, seguro y sin trabas de la ayuda humanitaria en la Franja. Respecto a las órdenes de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), recalca que son "jurídicamente vinculantes" y deben respetarse y aplicarse. "Es necesario investigar de forma exhaustiva e independiente las violaciones del derecho internacional humanitario y garantizar la rendición de cuentas", ha apuntado. En este sentido, pide al Ejecutivo de Benjamin Netanyahu que evite acciones que "empeoren las condiciones de vida de la población civil de Gaza" y que "cumpla las obligaciones que le impone el derecho internacional". Asimismo, la UE reitera la llamada a un "alto el fuego inmediato" que ponga fin a la difícil situación de la población civil de Gaza, incluyendo también a los rehenes tomados por Hamás. CATÁSTROFE HUMANITARIA EN GAZA En este sentido, el comunicado de Borrell insiste en denunciar la "catástrofe humanitaria" en Gaza, donde se han creado condiciones "que ponen en peligro la vida de una población civil ya gravemente debilitada y que sigue siendo objeto de inanición y de repetidos desplazamientos a campamentos de tiendas de campaña superpoblados". Así, critica que no hay final a la crisis y la población gazatí sigue sin ningún lugar adonde ir, atrapada en la Franja. Por todo ello, pone el acento en el colapso de los sistemas de saneamiento, de gestión de residuos sólidos y salud, lo que ha propagado enfermedades e infecciones cutáneas y respiratorias.