Día 11. Del récord de Duplantis a la plata del colombiano Barajas

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(Actualiza con el récord del mundo de Duplantis)

París, 5 ago (EFE).- El sueco Armand Duplantis volvió a batir el récord del mundo de salto con pértiga (6,25 metros) en una jornada en la que el joven colombiano Ángel Barajas se hizo adulto con una plata olímpica que le coloca en la mesa de los grandes gimnastas asiáticos y el fútbol español volvió a ser protagonista al entrar en la final, ganando a Marruecos (2-1), con goles de Fermín, nueva ola del FC Barcelona, y de Juanlu, emergente jugador del Sevilla FC.

Estas son las cinco noticias de la jornada:

Saint Denis aclama a Duplantis tras su nuevo récord del mundo

París, 5 ago (EFE).- El sueco Armand Duplantis, con una victoria sin oposición en la pértiga, además con récord del mundo (6,25 metros) y saliendo aclamado del Estadio de Francia en Saint Denis, eclipsó la alegría de la keniana Beatrice Chebet, campeona olímpica de 5.000, y de la británica Keely Hodgkinson en 800, en una jornada histórica para el atletismo mundial en los Juegos Olímpicos de París 2024.

Ante casi 80.000 personas totalmente entregadas, Duplantis demostró por qué es el mejor saltador con pértiga de la historia. Se llevó el segundo oro olímpico sin ningún tipo de oposición y, cuando ya lo tenía asegurado, trato de deleitar al mundo entero con el intento por batir el récord mundial.

Ordenó colocar el listón en 6,25 metros, un centímetro más de la plusmarca que poseía. Lo intentó una vez. No salió. Lo intentó otra. Tampoco. A la tercera, con el estadio aclamándole, inició la carrera, miró hacía arriba, se impulsó con su pértiga y culminó un salto limpio que le hizo entrar en el olimpo de los más grandes atletas de la historia.

El gimnasta colombiano Ángel Barajas agitó la jornada final de este deporte en los Juegos de París con una medalla de plata en la barra que le sitúa en el club de los mejores, codo con codo con los gigantes asiáticos, y que da su país su primera medalla en estos Juegos y la primera de siempre en la gimnasia.

El cucuteño de 17 años, el más joven de la competición, se hizo adulto en el Estadio de Bercy. Compitió como tal, con un temple que le permitió esquivar los errores que cometieron algunos de los favoritos, en una final con numerosas caídas.

Barajas, subcampeón mundial júnior en 2023, dio un golpe sobre la mesa en su primera temporada en la categoría absoluta y deja a la comunidad gimnástica expectante ante un futuro que se prevé brillante. El oro fue para el japonés Shinnosuke Oka, que unos minutos antes había ganado el bronce en paralelas, con 14,533 puntos. Barajas obtuvo la plata con 14,533 y el bronce lo compartieron el chino Boheng Zhang y el taiwanés Chia-Hung Tang con 13,966.

España sufrió, pero remontó ante Marruecos (1-2) gracias a los goles de Fermín López y del revulsivo Juanlu Sánchez en la segunda parte para volver a disputar una final olímpica. La segunda consecutiva tras la de Tokio 2020 en la que se fue con una plata que intentará convertir en oro el próximo día 9 de agosto en París.

El partido lo empezó ganando Marruecos en las gradas. En la reunión prepartido del domingo se comunicó que el público iba a estar dividido en un 70% para Marruecos y un 30% para España. Fue un porcentaje muy optimista de para los españoles. El rojo y el verde fueron amplia mayoría con alguna bandera de España esporádica en un Vélodrome que no se llenó. Unos 60.000 espectadores de los 67.000 de capacidad máxima.

Adrián Bernabé fue el que, con su energía, generó el empate de España. Se internó en el área, se buscó la vida ante la presión de tres jugadores de Marruecos y consiguió rascar un balón suelto que cogió Fermín y, con la zurda, igualó el marcador en el minuto 66, anotando su cuarto gol del torneo. Y Juanlu Sánchez, novedad en la convocatoria en lugar de un Diego López que no se encontraba al 100%, culminó la remontada. Activo pidiendo el balón por dentro y por fuera y mostrándose en ataque, acabó llegándole su premio.

Cinco milésimas. Esa ínfima fracción de tiempo es la que permitió a Noah Lyles salir por la puerta grande del Estadio de Francia y entrar en el libro de historia de los campeones olímpicos de los 100 metros, una distancia que, cada cuatro años, define al rey de la velocidad, un trono que ahora ocupa el estadounidense, el 'elegido' para muchos.

Durante muchos años, de 2008 a 2016, el jamaicano Usain Bolt fue el hombre más rápido del mundo y, de hecho, las dos plusmarcas mundiales de los 100 y 200 metros aún las conserva él con 9,58 y 19,19, respectivamente.

"Dios mio, soy el elegido. Siendo honesto pensaba que si corría en menos de 9.83 las semifinales sería difícil vencerme pero al final el oro fue más caro. Parece que este momento estaba destinado para mi y que yo iba a ser el elegido, como me dijo Snoop Dog", declaró Lyles, al término de la carrera, en alusión a su amigo, el rapero estadounidense, que se está paseando por las distintas sedes de los Juegos Olímpicos de París con su peculiar vestimenta.

La brasileña Rebeca Andrade, oro en suelo, y las italianas Alice D'Amato y Manila Esposito, oro y bronce en barra fueron las protagonistas de la jornada final de la gimnasia artística en París, en la que Simone Biles no pudo ampliar su cuenta de tres oros pero sumó una plata sobre el tapiz de Bercy.

La estadounidense, invencible en las jornada precedentes, se cayó de la barra y se salió dos veces del cuadrilátero en su rutina de suelo, unos errores que hasta ahora no había cometido en sus exhibiciones gimnásticas en París.

Andrade logró su cuarta medalla de estos Juegos, primera de oro, con 14,166 puntos a cambio de un ejercicio brillante, defendido con seguridad en cada una de sus dificultades.

La alta exigencia del ejercicio de Biles, 6,900 frente a los 5,900 de Andrade, le permitió alcanzar la plata pese a sus dos salidas, con un total de 14,133. Y por detrás de ella quedó su compañera Jordan Chiles con 13,766, tras reclamar con éxito una subida de su nota.

Fue la segunda vez en pocos minutos en que la brasileña superaba a Biles, tras acabar también por delante en la barra de equilibrio, aunque ambas fuera del podio.

La barra de equilibrios deparó una gloria olímpica desconocida a la gimnasia italiana, oro y bronce gracias a D'Amato (14,366) y Esposito (14,000), separadas por la china Yaqin Zhou (14,100).

Tras la plata por equipos, Italia se ratifica como el país puntero en la gimnasia femenina, solo por detrás de Estados Unidos. Sus gimnastas no conocían hasta ahora ninguna medalla en la barra. Cuarta fue Adrade (13,933), con una nota más baja de la que mereció su rutina.

Carolina Marín, lesionada ayer domingo en las semifinales de badminton de los JJOO en París, sufre una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha, de la que fue operada a comienzos de 2019, y padece además una rotura del menisco interno y externo, según el parte médico hecho público esta tarde por sus representantes.

"Próximamente se hará una valoración para determinar el tratamiento y concretar la fecha de la operación", explicó la nota informativa. EFE

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