(Actualiza con comunicado del Ejército)
Jerusalén, 4 ago (EFE).- Al menos cinco palestinos murieron en la madrugada de este domingo en un bombardeo israelí contra las tiendas de campaña para desplazados que rodeaban el hospital Mártires de Al Aqsa de Deir al Balah, en el centro de la Franja de Gaza, según la agencia de noticias local Wafa.
El ataque deja hasta el momento 18 heridos, según el Gobierno del enclave, controlado por Hamás, entre los que hay varios en estado grave, y todos ellos fueron atendidos en el propio hospital.
"Condenamos enérgicamente la perpetración de esta masacre", dijo el Gobierno islamista en el comunicado al respecto, en el que culpó como es habitual a la "ocupación israelí y la Administración estadounidense".
El Ejército israelí confirmó el ataque contra Deir al Balah a media mañana, sin especificar el punto exacto en el que se produjo, alegando que se registraron "explosiones secundarias" que achacó a "la presencia de armas en la zona".
En el ataque se golpeó "un operativo que llevaba a cabo actividades terroristas en Deir al Balah".
Drones israelíes bombardearon las tiendas de campaña de los centenares de desplazados que se refugian en torno al hospital, apuntó Wafa, lo que desencadenó además un aparatoso incendio en el campo de refugiados.
En vídeos capturados por los propios desplazados se ven las tiendas, reducidas a su esqueleto entre las llamas, mientras varias personas tratan de rescatar los cuerpos de las víctimas del fuego y otras intentan evitar que este se extienda hasta sus propios campamentos.
Un 90 % de la población de la Franja de Gaza está desplazada, según la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), y buena parte de ella reside hacinada en campamentos de refugiados en el centro y sur del enclave como el que envuelve al Mártires de Al Aqsa.
Por la noche, el Ejército también atacó una vivienda en el oeste de Deir al Balah, matando a tres personas más, según Wafa.
A unos cinco kilómetros hacia el norte, en el campamento de refugiados de Nuseirat, la aviación israelí lanzó "bombardeos de artillería pesada" contra las inmediaciones de la compañía eléctrica y la escuela malaya, en el norte, así como contra la occidental área de Al Hasayna.
En un comunicado castrense emitido hoy, las fuerzas armadas señalaron haber matado a un miliciano de Hamás, Ismail Nofal, en otro ataque contra este mismo campamento que según medios palestinos se produjo el jueves.
Era el hijo del comandante Ayman Nofal, miembro del consejo militar de Hamás fallecido en otro ataque en octubre. Según el Ejército israelí, Ismail era el "responsable del lanzamiento de cohetes contra territorio israelí" y participó en los ataques del 7 de octubre, en los que murieron 1.200 personas en Israel y otras 251 fueron secuestradas.
En el campo de refugiados de Yabalia, en el norte de Gaza, ocho personas más perdieron la vida en el ataque aéreo contra la vivienda de la familia Al Amoudi, en el noroeste del campamento.
Todos ellos fueron trasladados al hospital Kamal Adwan, uno de los últimos en funcionamiento en el norte, según Wafa.
Mientras tanto, el Ejército israelí roza los tres meses de operación en la sureña Rafah, donde dijo hoy llevar a cabo operaciones basadas en inteligencia y haber desmantelado "infraestructuras terroristas", sin dar más detalles al respecto.
"En el último día, las Fuerzas Aéreas destruyeron aproximadamente 50 objetivos terroristas en la Franja de Gaza", finaliza su comunicado, identificando entre ellas a milicianos, puestos de observación y otras posiciones e infraestructuras .
Desde que comenzó la guerra en Gaza el fuego israelí ha matado a 39.550 palestinos, entre ellos más de 16.300 niños, según el recuento del Ministerio de Sanidad del enclave, en manos de Hamás.
A ellos se suman un total de 91.280 heridos y los miles de cuerpos que los equipos de rescate aún no han podido extraer de entre los escombros y áreas de difícil acceso. EFE
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