Colombo, 29 jul (EFE).- La organización Human Rights Watch (HRW) denunció este lunes una campaña para convertir lugares de culto pertenecientes a minorías en sitios budistas, la religión predominante en la nación isleña.
"Organismos gubernamentales, como el Departamento de Arqueología, el Ejército y la Policía, han participado en una estrategia concertada contra la cultura y las prácticas de las minorías religiosas", afirmó HRW en un comunicado.
La campaña responde a un "patrón" contra templos en el norte y el este del país, según la organización pro derechos humanos, en el que las autoridades y líderes budistas han "dañado o quitado ídolos hindúes" entre amenazas o arrestos de fieles de religiones minoritarias.
"También se han apropiado de tierras de tamiles y musulmanas", constató HRW.
Esta campaña contra las minorías "se aceleró" en 2020 bajo el mandato del expresidente Gotabaya Rajapaksa, quien según la organización formó un grupo de trabajo integrado por oficiales de seguridad y monjes budistas para gestionar el patrimonio de la Provincia Oriental.
"Activistas calculan que el Departamento de Arqueología del gobierno ha inspeccionado unos 600 templos hindúes en la Provincia Oriental, preludio frecuente de que el clero budista y las fuerzas de seguridad nieguen el acceso a los fieles hindúes", indicó HRW.
Aunque el grupo de trabajo ya no está activo bajo el mandato del actual presidente, Ranil Wickremesinghe, el mandatario "ha hecho poco o nada para reducir o revertir las violaciones".
Entre los ejemplos de esta campaña citados por HRW figura un incidente el pasado 23 de febrero, cuando las fuerzas de seguridad impidieron la celebración de un festival hindú en el distrito de Trincomalee. La organización también subrayó la destrucción de un templo hindú por soldados en febrero de 2021, al que siguió la construcción de un templo budista en cuya inauguración participó personal militar.
"Las ruidosas proclamas de reconciliación del gobierno de Sri Lanka suenan huecas ante la creciente supresión de las identidades religiosas y culturales minoritarias", constató Meenakshi Ganguly, subdirectora para Asia de HRW.
La organización llamó a la comunidad internacional a presionar a Sri Lanka, para que el Gobierno de la nación isleña garantice los derechos de las minorías frente al "nacionalismo budista cingalés".
El 70 % de la población profesa el budismo en Sri Lanka, un país que cuenta con importantes minorías como la hindú (15,5 % y principalmente tamil), la musulmana (7,6 %) y la cristiana (7,5 %). EFE
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