Jerusalén, 26 jul (EFE).- "La guerra no terminará, señora candidata", fue el mensaje que quiso lanzar en su cuenta de X este viernes el ministro de Seguridad Nacional, el ultraconservador y colono, Itamar Ben Gvir a la vicepresidenta de Estados Unidos y futura candidata demócrata, Kamala Harris, tras pedir el fin de la guerra en Gaza en la reunión que mantuvo con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu en Washigton.
“Acabo de decirle al primer ministro Netanyahu que es hora de que se cierre el acuerdo. Así que a todos los que han estado pidiendo un alto el fuego y anhelan la paz, los veo y los escucho. Hagamos el acuerdo para conseguir un alto el fuego y poner fin a la guerra”, declaró Harris ante la prensa al final del encuentro.
El sector más ultra del Ejecutivo israelí se apresuró en repudiar estas palabras de Harris que optó por un discurso levemente alejado de la línea del presidente, Joe Biden, en el que buscaba mostrar una mayor empatía hacia el sufrimiento del pueblo palestino.
"Harris reveló al mundo lo que he estado diciendo durante semanas. El acuerdo implicar en una realidad rendirse a Sinwar, un fin de guerra que permitiría a Hamás recuperarse y un abandono de los rehenes retenenidos. ¡No podemos caer en esa trampa", aseveró en un mensaje publicado en su cuenta de X, otro de los ministros más radicales, el de Finanzas, Bezalel Smotrich.
Los partidos de extrema derecha que conforman el Gobierno de Netanyahu se resisten a frenar la ofensiva que dura ya casi diez meses y que ha dejado un enclave palestino devastado. En más de una ocasión, han amenazado en abandonar la coalición si finalmente el mandatario israelí firma un acuerdo de tregua con el grupo palestino.
"Lo que ha pasado en Gaza en estos últimos nueve meses, esas imágenes de niños muertos y personas desesperadas que huyen, algunas por segunda, tercera o cuarta vez… No podemos mirar para otro lado ante estas tragedias, no podemos permitirnos quedarnos insensibles ante el sufrimiento, insistió Harris ante la prensa tras salir de la reunión con Netanyahu.
Hamás, sin embargo, tildó las declaraciones de la vicepresidenta Harris de "una mentira estadounidense renovada" a la que le recordó que podrían haber detenido la ofensiva israelí con la suspensión de su apoyo militar al Estado hebreo.
"La administración estadounidense debe trabajar para detener la guerra de genocidio, sabiendo que Netanyahu fue quien interrumpió repetidamente el acuerdo, y debe ser presionada y obligada a detener la guerra brutal contra nuestro pueblo indefenso", indican en un comunicado.
Desde el pasado 7 de octubre, los ataques israelíes por tierra, mar y aire contra la Franja de Gaza han dejado ya más de 39.000 muertos, la mayoría mujeres y niños, más de 90.000 heridos; además de miles de personas desaparecidas que siguen bajo los escombros.