Lucía Martín-Portugués: "Me gustaría dejar un camino más transitable en la esgrima"

Guardar

Nuevo

infobae

La tiradora española Lucía Martín-Portugués asegura que en Paris 2024 confía en transformar la motivación previa y los buenos resultados del ciclo olímpico en un "camino más transitable" para los esgrimistas que vengan por detrás, y es que a sus 33 años debutará en una cita olímpica pese a los problemas que ha tenido en su carrera para poder dedicarse a su deporte y hacerlo en la elite. "En mi caso, más que presión es motivación porque me gustaría a través de todos estos resultados que estamos consiguiendo, todas las armas, poder dejarle un camino un poco más transitable a los que vienen por detrás de mí que el que hemos tenido nosotros", explicó en rueda de prensa este miércoles. La madrileña cree que forma parte de una generación que ha pasado "grandes crisis". "Hemos tenido reducciones de presupuesto económico muy grande, entonces yo más que verlo como una presión lo veo como que han sido los grandes Juegos del esfuerzo. Es decir, si nosotros lo hemos conseguido a pesar de todas las circunstancias que ha vivido España, el resto lo vais a tener más fácil y nosotros vamos a ayudar intentando daros visibilidad", aportó. Martín-Portugués logró el billete olímpico desde el exigente ranking europeo, donde Italia, Francia o Hungría atesoran una amplia historia de medallas internacionales. Ha acumulado siete medallas en este ciclo olímpico, una de las mejores de Europa, incluidos los oros de la Copa del Mundo de Argelia y del Grand Prix de Túnez. La plata en Atenas, en el mes de marzo, confirmó su presencia en París. "Espero poder escribir más historias en este lugar histórico y darle a España por lo menos un poquito de lo que nos ha dado a nosotros a través de unas medallas olímpicas. Y bueno, con muchísimas ganas, yo ya estoy nerviosísima, no os voy a engañar. Epero que Carlos me pegue su calma y yo a él mi energía, y lleguemos a un combo perfecto", comentó en referencia a su compañero Carlos Llavador. "Respecto a mi primera participación, y espero que haya otra, ya estoy entusiasmada. Me está encantando el sitio, cómo está montado, cómo rodearte de la gente, hablar con ellos, relacionarte. La verdad, he estado en otros eventos de este tipo, pues Juegos Europeos o Juegos Mediterráneos, pero creo que nada es comparable al gran evento que son los Juegos Olímpicos. Me esperaba algo así, sí, pero muchas veces la realidad está por encima de la imaginación y de los sueños, y este ha sido uno de los casos", se sinceró. Martín-Portugués cree que el sable es "la mejor de las tres armas". "La mejor virtud que puede tener es que te otorga una capacidad de pensamiento rápido y de ejecutar transiciones que quizás las otras armas no te dan por la forma que se tiene de competir en el sable. Es un arma muy explosiva, muy rápida, y aprendes a no castigar tanto el fallo y pensar en el siguiente porque tienes muy pocos segundos hasta que empieza el siguiente tocado", reconoció. "Creo que lo peor que puede tener el sable es que si te descuidas esos segundos o te confías o crees que vas por encima del marcador y ya has ganado, da la vuelta rapidísimo y puedes perder simplemente por tu falta de concentración", añadió, en este sentido. A nivel personal, necesita asentarse en París y centrarse en la competición. "Ahora mismo creo que lo que necesito es empezar a sentarme, empezar a ubicarme, empezar a hacer un poco el 'ratilla' lo llamo yo, meterte por los sitios del pabellón empezar a estar bien y empezar a entrar en contacto con lo que es la esgrima y la propia competición. Que al final estás dando tantas vueltas por el mundo, pero bueno más estresante que una competición creo que no hay nada", argumentó. "A mí me encanta decir que no tengo supersticiones, pero es mentira. Sí que tengo algunas... Bueno, yo lo llamo manías, pero yo creo que ya seamos sinceros, ¿no? Sí que me gusta usar la misma camiseta el día del individual, las mismas medias a conjunto con esa camiseta el día del individual. Al final son rutinas que te aportan confianza, que no te van a hacer ganar ni perder. Cuando me visto con el traje de esgrima, hacerlo de una determinada manera, refuerza ese momento de concentración previo a la competición", señaló al ser preguntada por sus manías. Y no estará sola en París, algo que agradece mucho. "El otro día leía que España había entrado en el cuarto puesto de compra de entradas y mi familia la ha subido al cuarto, eso ya os lo digo seguro. Tuve mucha suerte porque le tocó tres veces el sorteo a mi familia y pudimos comprar muchas entradas. Entonces, bueno, casi la mitad del gran palé van a ser Martín-Portugués gritando, así que os vais a acordar", apuntó distendida y entre risas.

Guardar

Nuevo