Personas trans piden una mejora del sistema de salud al nuevo Gobierno laborista

Cristina Alonso Pascual

Londres, 21 jul (EFE).- El colectivo de personas trans en el Reino Unido reclama al nuevo Gobierno laborista una mejora en el sistema de salud británico, además de que dejen de lado la llamada 'guerra cultural' para poder vivir sin ser usadas como "armas políticas".

Según la directora de la comunidad de personas trans TransActual, Jane Fae, la salud es el problema principal para la gente que sufre disforia de género y que tal vez quiere transicionar pero se encuentra con un sistema sanitario sin suficientes recursos.

Para Fae, además de una mejora en la sanidad, los miembros del colectivo solo quieren que les dejen "en paz", y que el debate, con discrepancias entre diversos grupos sociales en el Reino Unido, concluya.

"No queremos apropiarnos de nada, no se trata de un complot planeado para acabar con la familia –como parece que quieren dar a entender–, sino que simplemente queremos vivir nuestras vidas sin que nos conviertan en un arma política todo el tiempo", reclamó.

Para Fae, el impacto informativo sobre las personas trans, que califica de "absolutamente horrible", ha causado un daño "incalculable" a la comunidad. "Diría que ha habido una crisis colectiva de salud mental", agregó.

De hecho, según un informe de septiembre de 2023 publicado por el Centro Nacional de Investigación Social británico, el debate acerca de los derechos trans en los últimos años parece haber resultado en un aumento de las personas que reconocen tener prejuicios hacia el colectivo, aunque la mayoría –casi dos de cada tres– siguen mostrando su apoyo.

De acuerdo con Claire Thurlow, del departamento de Derecho y Políticas de la Universidad de Cardiff, la tradición de medios sensacionalistas en el Reino Unido ha podido ayudar a alimentar la polarización alrededor de las personas trans.

"Creo que algunas cosas que se dan como ciertas no son más que una percepción, como la idea de que esto va de personas trans contra mujeres y que incrementar los derechos de las primeras implica disminuir los de las segundas", consideró.

Para Thurlow, de hecho, disminuir los derechos de personas trans puede afectar también a los de otros colectivos, incluso a las propias mujeres cis. "Si dices que un espacio es para, cito, 'mujeres biológicas', ¿cómo vas a saberlo? No se trata de biología, sino de cómo alguien se presenta", ejemplificó.

Ahora, después de 14 años, el Gobierno conservador ha dejado paso a uno laborista, que, en su programa, incluía, entre otras propuestas, prohibir las terapias de conversión y proteger, al mismo tiempo, la libertad de la gente para "explorar su orientación sexual e identidad de género".

No obstante, Thurlow cree que, teniendo en cuenta la trayectoria del grupo laborista, "no harán mucho necesariamente por la comunidad trans".

"Lo que sí pienso es que no hablarán tanto de ello, lo que en sí mismo es un paso adelante respecto a la situación actual, con lo que parte de la histeria en torno a este tema se reducirá", opinó.

Así lo consideró también Fae, que no sabe si los laboristas tomarán decisiones que beneficien al colectivo, pero que mantuvo la esperanza que el Ejecutivo actual no vea "la demonización de las personas trans como un medio para ganar poder".

Al fin y al cabo, el deseo de las organizaciones, como Trans Pride Brighton, es que el nuevo Gobierno tenga en cuenta a la comunidad en los debates que les afecten, como dijo la directora general de la asociación, Sarah Savage, en una entrevista con la agencia británica PA.

Ese es el mismo mensaje trasladado desde TransActual en un comunicado tras la victoria laborista en las elecciones: "Si quieres ser un aliado real, entonces una buena máxima es la de 'nada de nosotros sin nosotros'". EFE

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