Woodstock (R.Unido), 18 jul (EFE).- El primer ministro británico, Keir Starmer, quiere redirigir el debate migratorio en Europa a librar un combate con todos los medios contra las redes de tráfico de personas y hacia un mayor apoyo a los países de origen, para lo que anunció una nueva ayuda de 84 millones de libras (100 millones de euros).
Starmer se mostró satisfecho, en la conferencia de prensa de clausura de la cumbre de la Comunidad Política Europea (CPE), por una "productiva y exitosa" cita, que giró en buena medida en torno a la cooperación en la cuestión migratoria.
"En inmigración estamos reseteando nuestra cooperación. Combatiremos a las bandas criminales con soluciones prácticas en línea con el derecho internacional", señaló.
Starmer, que se mostró alarmado ante la impunidad con la que actúan las redes criminales que trafican con personas, explicó que su país está aumentando la presencia de sus agentes en Europol y ha alcanzado sendos acuerdos en la materia con Eslovenia y Eslovaquia.
De igual forma, señaló que el Reino Unido trabajará con sus "socios europeos" para compartir datos y conocimientos que permitan que ese combate sea más efectivo.
A su juicio, se trata de la primera vez que la CPE, que hoy celebró su cuarta cumbre, aborda la lucha contra las redes criminales como asunto principal, pese a reconocer que no existen "soluciones milagrosas".
"Es un problema muy serio que requiere de una respuesta seria. Por eso nos hemos alejado del plan de Ruanda (de deportación de inmigrantes indocumentados que aprobó el Ejecutivo conservador) y hemos apostado por aplastar a las bandas", agregó.
Para el nuevo jefe del Ejecutivo británico, una "parte vital" para resolver el problema es atajar sus raíces en los países de origen.
Por ello, anunció que Londres destinará un paquete adicional de 100 millones de euros de financiación para "proyectos en África y Oriente Medio".
"Los problemas más allá de nuestras orillas tienen su eco en casa", aseveró Starmer.
El dirigente laborista se declaró "orgulloso" por acabar la cumbre "con unas relaciones más fuertes con Europa y con la CPE en una mejor posición".
Y adelantó que, tras la próxima reunión en Hungría del próximo noviembre, las cumbres de la CPE en 2025 tendrán lugar en Albania y Dinamarca, cumpliendo con la regla no escrita de alternar sedes de la UE con extracomunitarias. EFE
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