Quito, 18 jul (EFE).- La ministra de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana de Ecuador, Gabriela Sommerfeld, aseguró este miércoles que el juicio político que la oposición ha iniciado en la Asamblea Nacional (Parlamento) contra ella es un proceso en contra del país.
En una carta publicada en redes sociales antes de que se inicie en la Comisión de Fiscalización de la Asamblea la primera fase del juicio político, Sommerfeld rechazó la acusación que le imputa un presunto incumplimiento de funciones.
Los cargos contra la canciller ecuatoriana se derivan de la invasión policial ordenada por el presidente Daniel Noboa a la Embajada de México el pasado 5 de abril para detener a Jorge Glas, exvicepresidente de Rafael Correa, a quien el Gobierno mexicano le había otorgado asilo diplomático, si bien contaba con una orden de detención en su contra por un caso de corrupción donde está imputado.
Glas, que rechaza los cargos en su contra y se declara un perseguido político, fue uno de los hombres fuertes del Gobierno de Correa y se encuentra desde su última detención recluido en La Roca, la prisión de máxima seguridad de Ecuador, pues tenía pendiente de terminar de cumplir una pena de ocho años de cárcel por dos sentencias por corrupción dictadas en 2017 y 2020.
Mientras, México y Ecuador se han contrademandado en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya con acusaciones mutuas de haber contravenido convenios internacionales sobre relaciones diplomáticas.
En su carta, Sommerfeld señaló que el Ecuador presidido por Noboa "propone salvar su institucionalidad con ahínco y valor".
"Hemos enfrentado con dedicación el proceso que México presentó en contra de Ecuador en la Corte Internacional de Justicia, el mismo que no dista en sus argumentos del presentado en mi contra en la Asamblea", apuntó la jefa de la diplomacia ecuatoriana.
"Eso convierte el juicio político en un proceso que no está en contra de Gabriela Sommerfeld, sino de nuestro país, Ecuador", apostilló.
La ministra señaló que ha presentado ante el Legislativo "más de veinte pruebas de descargo sobre las tres acusaciones" que forman parte del juicio político.
Para Sommerfeld, ese conjunto de pruebas demuestra "el pleno cumplimiento" de sus funciones al frente de la Cancillería ecuatoriana.
En ese sentido, apuntó que entre sus obligaciones como canciller está "defender, en el orden diplomático, la soberanía y dignidad de Ecuador". "Así lo he hecho y lo seguiré haciendo", apuntó. "Voy firme y convencida a defender, defender a la institución y a nuestro país", concluyó.
Para este jueves está convocada en la Asamblea Nacional una sesión de la Comisión de Fiscalización en la que se aprobará el calendario de la primera fase del juicio político contra Sommerfeld. EFE
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