Los ataques israelíes en el norte de Gaza obligan a cerrar el Hospital Al Ahli

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Jerusalén, 8 jul (EFE).- La diócesis de la Iglesia episcopal (anglicana) en Jerusalén confirmó este lunes que el Hospital Bautista Al Ahli, ubicado en el casco antiguo de ciudad de Gaza y uno de los pocos que quedaban operativos en la zona, ha tenido que cerrar tras recibir una orden de evacuación de las autoridades israelíes.

"Suheila Tarazi, director del hospital, aseguró que el 7 de julio, entre las 18.00 y las 19.00 horas, una gran cantidad de fuego de drones tuvo lugar en las inmediaciones del hospital. A esto lo siguió un anuncio del Ejército de Israel de que el área había sido declarada Zona Roja, y que todo el mundo debía evacuar inmediatamente todos los edificios", dijo la diócesis en un comunicado.

El grupo confirmó que el hospital se encuentra fuera de servicio, en un momento en que los heridos y enfermos del norte de Gaza apenas tienen opciones para buscar tratamiento.

"Pedimos a las fuerzas israelíes que nos permitan continuar con nuestro ministerio sagrado de dar cuidados médicos y curar", dijo en el comunicado el arzobispo anglicano de la diócesis de Jerusalén, Hosam Naoum.

Además, la diócesis aseguró que una de sus ambulancias fue atacada este lunes de camino al hospital, y que de momento no tienen información sobre el estado del conductor ni de los pacientes que transportaba.

Ya esta mañana, el director del Hospital Indonesio, ubicado a las afueras del campamento de refugiados de Yabalia (norte de Gaza), anunció que el centro "ha declarado el estado de código Rojo (emergencia extrema) tras recibir la señal de evacuar el Hospital Al Ahli" de ciudad de Gaza.

Según el portavoz de la Defensa Civil en el enclave, "los ciudadanos salieron de las cercanías del Hospital Al Ahli por miedo" a los ataques.

Hace tres días solo 15 de los 36 hospitales de Gaza estaban en funcionamiento, tres de ellos en el sur del territorio, y el acceso a sus instalaciones es parcial dada la inseguridad en sus alrededores, según el último informe de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).

Además, la falta de combustible impide que los centros puedan dar ayuda a todos los pacientes, lo que obliga a los trabajadores sanitarios y a los organismos humanitarios a tomar difíciles decisiones sobre quién recibe tratamiento, según la OCHA.EFE

jdg/sga/jam

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