Tomás Frutos
Nuremberg, 2 jul (EFE).- Antonio Rudiger, central del Real Madrid, está siendo uno de los jugadores más importantes de Alemania. Ya no solo por su faceta defensiva, imprescindible para Julian Nagelsmann, sino por su impacto en la construcción, erigiéndose como el central que más pases filtra al último tercio de toda la Eurocopa 2024.
"España presiona muy alto, aunque eso les obliga a dejar espacios que podemos explorar", declaró Leroy Sané este martes en rueda de prensa desde desde Herzogenaurach, localidad situada a unos 18 kilómetros de Nuremberg, donde la 'Mansschaft' prepara el torneo.
Toda una declaración de intenciones que tiene todo le sentido. Si España presiona arriba y al hombre, Alemania tiene que buscar los espacios a la espalda de la defensa para encontrar a los delanteros a la carrera.
Pero no todo puede ser jugar al espacio detrás de la zaga. A Nagelsmann le gusta aprovechar el espacio entre centrocampistas y defensas rivales. Y Rudiger se está destapando como un experto en la salida de balón.
El dominio de Alemania en fase de grupos tiene su razón de ser también desde la perspectiva de la construcción desde atrás. Allí, Rudiger es un actor principal pese a que tenga mayor fama de seer más diestro en artes defensivas puras. Pero la estadística no engaña, es el responsable de la salida de balón en Alemania.
El defensa de 31 años, nacido en Berlín y ex del Chelsea, es el segundo central de todo el torneo que más pases intenta (333) y el segundo que más éxito tiene (314), solo superado en ambos registros por el inglés John Stones, central del Manchester City, según datos de BeSoccer para EFE.
Es también el segundo que más pases largos intenta (39) y que más éxito tiene de toda la Euro (28).
Pero el dato que más puede sorprender es su clarividencia para filtrar al último tercio. Ante equipos encerrados, con los defensas de Alemania con potestad para salir con el balón controlado en campo rival y con el embudo de jugadores en el carril central, Rudiger es el central que más pases filtra al último tercio con éxito. Ha conseguido 54 de los 58 que ha intentado. Un 93 %.
Los datos cobran aún más relevancia cuando se tiene en cuenta al resto de jugadores de la Euro. No solo a los centrales. Es el tercero en el ránking general de jugadores que más pases intenta y más pases completa tras Kroos y Stones; y es solo tras Kroos el segundo jugador que más pases al último tercio intenta y completa.
Sus datos con Alemania respecto al Real Madrid en el último año confirman la tendencia y la apuesta de Nagelsmann, que le ha dado las llaves de la salida de balón.
Con el Real Madrid, Rudiger intenta una media de 50 pases por partido, mientras que con Alemania casi 80. También hay gran diferencia en el pase largo: Con su club, 5 por partido; y con la selección más de 7.
Pero el gran contraste es en los pases al último tercio. Con el Real Madrid intenta unos 69 por partido, pero con Alemania casi 86. Ahí está la diferencia y el ajuste de Nagelsmann.
Sus "nuevas" cualidades no están mermando su rendimiento defensivo, más conocido. Acumula 49 recuperaciones en la Eurocopa. Solo el italiano Alessandro Bastoni (53), del Inter; el danés Jannik Vestergaard (52), del Leicester; y el también danés Joachim Andersen (51), del Crystal Palace, están por delante de él como centrales que más recupera
Con el Madrid, superada la fase de grupos y contando solo la fase eliminatoria en Liga de Campeones, en la que solo se perdió el partido de ida ante el Leipzig por lesión, acumuló 39 recuperaciones. En 6 partidos. Con Alemania lleva solo 4 de Eurocopa.
Nagelsmann tiene un arma oculta en defensa que le genera muchas ocasiones de manera silenciosa. Ya no es que defienda bien, que sea una roca, es que ahora lleva la batuta en la salida de balón de la 'Mannchasft', antes de que le llegue el balón a Toni Kroos, claro. Pero también toma responsabilidades para desarbolar las defensas en la zona de tres cuartos cuando Alemania se estanca. Rudiger, en esta Eurocopa, es en defensa un gran central, pero en ataque es casi un centrocampista más. EFE
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