París, 2 jul (EFE).- El expresidente francés François Hollande alertó este martes de que "la situación de Francia es grave" por la posibilidad de que la ultraderecha llegue al poder y apoyó la idea de una alianza de los demás partidos para gobernar de forma provisional si el domingo no hay una mayoría.
En unas declaraciones al canal público France 2, Hollande, jefe del Estado entre 2012 y 2017, justificó esa posibilidad en que "hace falta responsabilidad" porque "el país no puede pararse".
"Tiene que haber una solución de compromisos mínimos al menos durante un año", explicó, en referencia a que tras la segunda vuelta de las elecciones legislativas del próximo domingo no puede haber nuevos comicios durante un año por mandato constitucional.
Hollande reconoció que los programas electorales que separan al arco político que va de los conservadores a los comunistas son muy diferentes, pero insistió en que "hay que gobernar el país"
El izquierdista La Francia Insumisa (LFI) ha puesto en duda su entrada en un acuerdo de ese tipo ya que asegura que solo entrará en el Gobierno para aplicar su programa.
Hollande consideró que eso no supondría una ruptura de la unión de la izquierda, pero dejó claro que los partidos del Nuevo Frente Popular pueden entrar en ese esquema haciendo cumplir algunas de sus promesas.
"Hace falta que la izquierda sea una solución y no solo una barrera" a la ultraderecha, subrayó.
De entrada, dijo que el único partido que puede lograr la mayoría absoluta el domingo es el ultraderechista Agrupación Nacional (RN), y si no lo consigue tendrá que "mostrar su orientación".
"Está claro que el RN no tendrá capacidad de actuar" sin mayoría absoluta por la dificultad para lograr pactos, vaticinó. Por ello, dijo que el bloque que "pueda constituir una solución" debe dar un paso adelante.
"La situación en Francia es grave. El mundo nos mira, Europa se inquieta", alertó.
Hollande se mostró muy crítico con la decisión del presidente Emmanuel Macron de convocar estos comicios tras su derrota en las elecciones europeas del 9 de junio.
"No estoy seguro de que haya sido producto de una estrategia, sino más bien de un impulso que ha sido extremadamente dañino para el país", sentenció.
Hollande, que no se presentó a la reelección como presidente en 2017, volvió a la política activa para estos comicios y quedó en primer lugar en la primera vuelta en la carrera por un escaño en su departamento de Corrèze (centro).
Explicó su decisión, "muy pensada", de volver a la política activa por su "compromiso". "Hay que saber cuándo hacerse a un lado y hay que sacer cuándo comprometerse", reflexionó. EFE
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