Aviñón (Francia), 29 jun (EFE).- Unas 200 personas se concentraron este sábado, jornada de reflexión en Francia en vísperas de la primera vuelta de las elecciones legislativas y a solo unas horas del comienzo del Festival de Aviñón (el más grande del mundo del teatro junto al de Edimburgo) bajo el lema "no pasarán", que evoca la lucha antifascista, y en defensa de los derechos sociales del sector.
La movilización, en la que participaron tanto trabajadores del teatro, como artistas, vecinos y miembros de los sindicatos, se desarrolló en la plaza del imponente Palacio Papal de Aviñón, en cuyo patio se inaugura esta noche el certamen con una obra de la dramaturga española Angélica Liddell.
Allí, en las escaleras que debe subir esta noche el público que asista a la apertura, las organizaciones sindicales convocantes del acto, encabezadas por la CGT francesa, desplegaron dos pancartas.
Una contenía el famoso lema "No pasarán", que se popularizó durante la Guerra Civil española en el bando republicano, y en la otra se leía el mensaje "La cultura contra el racismo y por el progreso social".
Aunque en la jornada de reflexión no se puede pedir el voto por uno u otro partido, lo "grave" del panorama electoral -con la extrema derecha de Marine Le Pen favorita en las encuestas- motivó la convocatoria de este acto, indicó Ghislain Gauthier, secretario general de CGT Espectáculos, al tomar la palabra en la concentración.
"Hemos venido aquí para expresar nuestros valores. El racismo, la lucha contra la discriminación, son valores compartidos en el mundo del espectáculo ampliamente", precisó después Gauthier, en declaraciones a EFE.
Pero el acto también fue una protesta por lo que se considera un retroceso de las condiciones de trabajo del sector escénico con el Gobierno del presidente francés, Emmanuel Macron.
Según los sindicatos, en 2023 se recortó en 96 millones de euros su financiación. Además, se endurecieron las condiciones de acceso a la jubilación en Francia con su reforma del pasado año y está previsto que ocurra lo mismo con los subsidios de paro, si bien esos planes están ahora en suspenso por la llamada a las urnas.
"El Festival de Aviñón concentra particularmente un gran nivel de precariedad", lamentó Carlos Acha Moretón, un trabajador español que se mudó a Francia en busca de empleo en 2014 y es secretario general de la unión local de la CGT en Aviñón.
Esa precariedad, puntualizó Acha, no se refiere solo a los técnicos y artistas del teatro, sino también a la gran cantidad de personas que cada julio llegan a Aviñón para trabajar de manera temporal en hoteles, restaurantes y eventos relacionados con el festival.
Para el sindicalista español, el sistema de protección y fomento de las artes escénicas, entre otras disciplinas, que Francia ha construido desde la Segunda Guerra Mundial está amenazado no solo por una potencial victoria de la Agrupación Nacional (RN) de Marine Le Pen, sino también por la dinámica de recortes de los últimos años.
"Esta liberalización, este recorte de subvenciones, hace que el arte sea un objeto de consumo en las manos de los más ricos", argumentó.
El Festival de Aviñón comienza esta noche y se prolongará durante tres semanas con el español como idioma invitado de esta edición número 78. EFE
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