Bruselas, 28 jun (EFE).- La Fiscalía federal belga anunció este viernes en una rueda de prensa el cierre del 'caso de Brabante', la mayor investigación sin resolver de la historia de Bélgica sobre el asesinato de 28 personas en asaltos, especialmente en supermercados, en los años 80 que conmocionaron al país.
Según los medios locales belgas, tras reunir a las partes civiles implicadas en esta investigación dirigida en los últimos años por la juez Martine Michel, la fiscalía informó del cierre de la investigación de esta oleada de atracos, tomas de rehenes y sangrientos robos en supermercados, que causaron también 40 heridos.
"Es un mensaje que no es ni agradable de transmitir ni de oír, somos conscientes de que se trata de un golpe demoledor para las víctimas y sentimos una gran compasión por ellas", expresó a las familias la nueva fiscal federal, Ann Fransen, durante el anuncio del cierre de la investigación en rueda de prensa.
La investigación apuntaba como responsables de los asesinatos a los integrantes de un grupo conocido como 'Banda de Nivelles' (por el nombre de una localidad de la provincia del Brabante valón, en la región de Valonia), los cuales nunca llegaron a ser identificados.
"Se han llevado a cabo todas las actuaciones de investigación posibles y ahora consideramos cerrada la investigación sobre los responsables de estos horribles hechos", lamentó la fiscal.
Con ello, aseguró que todos los hechos que podrían atribuirse a la banda fueron revisados y reexaminados desde el primer informe, tanto viejas huellas como nuevas pistas, y "lamentablemente" no se pudieron esclarecer los hechos.
"Desgraciadamente, años de intensa investigación y esfuerzos decididos no han conducido al resultado que todos esperábamos: la identificación de los miembros de la Banda de Nivelles”, añadió Fransen.
La primera oleada de ataques se produjo en 1982, cuando asesinaron a un policía y torturaron y mataron a un vigilante de seguridad, además de herir de gravedad a agentes y cometer diversos robos.
En 1983, la banda asesinó a un total de 9 personas, una de ellas policía, durante diversos atracos a supermercados y tiendas de joyas y artículos textiles, además de un robo a un taxi.
Mientras que en 1984 la banda permaneció inactiva, en 1985 cometió sus tres robos más violentos, todos en supermercados de la cadena Delhaize.
En septiembre de 1985, los establecimientos situados en las localidades de Braine-l'Alleud y Overijse fueron asaltados, cobrándose la vida de tres y cinco personas, respectivamente.
El último y más mortífero robo tuvo lugar el 9 de noviembre en el Delhaize de Aalst, donde murieron ocho personas.
Tras el atraco, uno de los integrantes de la banda apareció muerto y, después de décadas, la investigación llevó a la policía a pensar que fue asesinado por otro miembro del grupo.
Los autores, que nunca fueron encontrados, fueron buscados en el entorno mafioso belga, en la antigua Gendarmería belga y en círculos de extrema derecha.
El expediente de los asesinatos de Brabante, localizados en la provincia del Brabante Flamenco situada en el centro de Bélgica y en la región de Flandes, consta de casi un millón de páginas, un caso sin resolver en el que trabajaron hasta cinco jueces de instrucción.
En un principio, los hechos que constituyen el núcleo de la investigación habrían prescrito en noviembre de 2015, pero el plazo de prescripción en este caso se amplió tras una enmienda legislativa que prevé una excepción para los hechos considerados "de extrema gravedad por su alcance, por el número de víctimas o por el intenso temor o terror suscitado en la opinión pública".
De hecho, a partir de esta reforma, siempre se puede reabrir la investigación sobre los asesinatos y ataques de la Banda de Nivelles si surgen nuevos hechos.
Tras el cierre de la investigación ahora, las víctimas tendrán acceso al expediente y a la investigación realizada y también tendrán la oportunidad de solicitar investigaciones adicionales. EFE
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