"Hay que generar más fisuras en mandos que sostienen a Ortega", dice opositor nicaragüense

Guardar

María M.Mur

Luque (Paraguay), 27 jun (EFE).- El excandidato presidencial nicaragüense Juan Sebastián Chamorro dijo en una entrevista con EFE que el régimen de Daniel Ortega cada vez se asemeja más al de Corea del Norte, por su crueldad y su histrionismo, y pidió a la oposición no cejar en su intento de "generar más fisuras" en los mandos que sostienen al líder sandinista.

Chamorro, de 53 años, fue uno de los 222 presos políticos que en febrero de 2023 fueron desterrados a Estados Unidos y despojados de su nacionalidad por "traidores" y "vendepatrias".

Considerado uno de los principales opositores al régimen y miembro de una de las familias más conocidas de Nicaragua -su tía Violeta Barrios de Chamorro fue presidenta entre 1990 y 1997-, el economista se encuentra en Paraguay para denunciar en el marco de la 54 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) que Nicaragua "se ha convertido en una enorme cárcel".

"Nosotros estuvimos en la cárcel 611 días como presos políticos, pero existen más de 6 millones de nicaragüenses que actualmente viven en una situación de cárcel: todas las libertades civiles y políticas están violentadas", aseguró.

Aunque Nicaragua abandonó formalmente la OEA en noviembre pasado por iniciativa del propio Ortega, el plenario del organismo analizará hasta el viernes la crisis desatada en el país tras las masivas protestas de abril de 2018, que dejaron al menos 355 fallecidos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

"Hasta la Academia Nicaragüense de la Lengua, los Boy Scouts y la Cruz Roja han sido eliminados. ¡Han cancelado incluso ONGs que daban albergue a perros y gatos callejeros! Ese es el nivel de represión que estamos viviendo", añadió Chamorro.

Ortega, quien retornó al poder en 2007 y desde 2017 gobierna junto a su esposa, Rosario Murillo, ha establecido una "dinastía familiar", que a Chamorro le recuerda tanto a las monarquías absolutistas de hace siglos como al régimen actual que gobierna desde Pyongyang: "Somos la Corea del Norte latinoamericana".

"No estamos hablando de una dictadura al estilo cubano, donde el Partido Comunista elige dentro de sus mecanismos no democráticos, donde hay cierta institucionalidad. Ortega ha destruido su propio partido, el Frente Sandinista de Liberación Nacional", explicó.

Esta lógica dinástica es, en su opinión, una de las grandes "debilidades" del régimen, ya que genera reclamos entre sus acólitos y trunca las aspiraciones de los mandos más altos cercanos a Ortega, pero al mismo es una oportunidad para la oposición.

"Hay que tratar de generar más fisuras como la que vimos con su propio hermano", indicó en referencia a Humberto Ortega Saavedra, exjefe del Ejército nicaragüense y uno de los líderes históricos de la revolución sandinista.

En una entrevista al medio Infobae en mayo pasado, el general en retiro lanzó inusuales críticas contra el Gobierno que encabezan su hermano y su cuñada y cuestionó los planes atribuidos a la pareja presidencial de designar como sucesor a su hijo, Laureano Ortega Murillo.

Horas después de la publicación, oficiales de la Policía Nacional irrumpieron en la vivienda de Ortega Saavedra y este quedó bajo total aislamiento.

"Hay que seguir enviando mensajes a los cuadros y decirles que si no han cometido un delito, si no son cómplices de la comisión de crímenes de lesa humanidad o de corrupción, tienen un espacio en la Nicaragua democrática del futuro", agregó Chamorro.

Pese a ciertas voces que abogan por una rebelión popular armada para sacar a Ortega del poder, el excandidato presidencial declaró que la única salida pasa por seguir cercando diplomática y económicamente al régimen, aunque la lucha pacífica "sea más lenta que la armada".

"La estadística muestra que las transiciones democráticas y pacíficas son más efectivas", concluyó.

Guardar