Dortmund, 26 jun (EFE).- A falta de apenas días para que comiencen los octavos de final de la Eurocopa 2024, en los que Suiza se medirá a Italia, continúan en paradero desconocido los tres ordenadores que la Federación Suiza de Fútbol denunció como robados hace ya dos días y que han generado la inquietud en la concentración que tiene lugar en Sttutgart.
Cuando Suiza disputó la última jornada de grupo ante Alemania en Frankfurt, en un partido en el que rozó la victoria y un liderato de grupo que finalmente cayó del lado de los favoritos gracias al postrero tanto de Niclas Fullkrug, se confirmó como una de las selecciones a tener en cuenta como posible sorpresa.
Impecable en la fase de grupos, llegó tapada a este torneo en el que ahora levanta admiración por su disciplina táctica. Tanto que alguien quiso revisar sus portátiles. El robo tuvo lugar la noche del 23 de junio, en el Hotel Maritim de Dusseldorf en el que el equipo de análisis de Suiza trabajaba analizando al resto de selecciones como posibles rivales.
"Puedo confirmar que tres ordenadores de nuestros empleados desaparecieron del hotel, hemos informado a la policía", declaró Adrian Arnold, portavoz de la federación suiza, a 'Bild'.
Eso sí, parece que si la intención del robo era la de obtener información táctica de Murat Yakin, seleccionador, fue una operación en vano.
"En los tres ordenadores no había guardados datos que utilizamos para este torneo. Si ha sido un sabotaje a nuestra selección, entonces ha salido mal", añadió Arnold.
El Hotel colaboró rápidamente con las autoridades germanas, a la que le entregó todo el material de las cámaras de seguridad. Aunque por el momento, los tres ordenadores y el culpable -o culpables- siguen en paradero desconocido.
Suiza, sin embargo, afincada en Sttutgart, continúa impertérrita su puesta a punto para el próximo partido, los octavos de final ante Italia, que prometen ser uno de los más igualados.
Con ordenadores o sin ordenadores, los suizos llegan ya como una de las selecciones revelación a esta fase del torneo que ya asaltó en 2021, en el que cayó por penaltis en los cuartos de final ante España, después de haber superado a Francia en los octavos, marcando su mejor resultado histórico. EFE
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