Los Estados miembros de la Unión Europea han aprobado este lunes dedicar 1.400 millones de euros procedentes de los ingresos generados por los bienes rusos congelados para ayuda militar a Ucrania, han confirmado varias fuentes diplomáticas a Europa Press, que señalan que los fondos se canalizarán a través del Mecanismo Europeo para la Paz para la adquisición de munición y defensas antiaéreas para Kiev. Frente al rechazo de Hungría que amenazaba con bloquear la medida, la UE ha podido avanzar en la transferencia de fondos procedentes de los bienes rusos inmovilizados en Europa. La UE ya había decidido el paso pero la aplicación estaba pendiente de la posición de Budapest. Finamente los 27 han podido sortear el veto gracias a que Hungría se abstuvo respecto a esta decisión hace semanas, por lo que ahora no tenía capacidad de veto sobre la aplicación de la misma, han indicado fuentes consultadas. El pasado mayo Hungría, pero también Eslovaquia o los países de la UE neutrales, caso de Irlanda, Austria, Chipre y Malta, ejercieron una "abstención constructiva" respecto a la decisión de dedicar los fondos extraordinarios al Mecanismo Europeo para la Paz con la que la UE pudo avanzar con esta medida. A su llegada el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, se ha mostrado confiado en que los 27 pudieran acordar este paso aun con el gobierno húngaro en contra, al señalar que hay "formas legales" de avanzar cuando un Estado miembro no quiere participar. "Consideramos que Hungría no quiere participar en la decisión y no es necesario que participe en la aplicación de la decisión", ha asegurado antes del encuentro, insistiendo en que la decisión no se podía dilatar más. De esta forma, el bloque europeo destinará gran parte de esos fondos, en torno al 90 por ciento, al instrumento con el que la UE ha enviado material bélico a Ucrania desde el inicio de la invasión rusa en 2022. En total, la UE cuenta con tener 2.500 millones procedentes de los ingresos generados por los bienes rusos y con esta decisión podrá canalizar un primer tramo de 1.400 millones a Ucrania en el mes de julio, cumpliendo el objetivo que se marcó. Fuentes europeas indicaron que estos fondos se usarán para comprar munición y defensas antiaéreas para Ucrania y una parte irá directamente a la industria militar ucraniana. En Bruselas consideran que la ayuda procedente de los bienes rusos inmovilizados será más directa que el habitual método por el cual los 27 envían material militar a Ucrania y luego esperan el reembolso a través del Mecanismo Europeo para la Paz, una opción que lleva bloqueada desde hace meses precisamente por el veto de Budapest, cuestión que irá a la cumbre de líderes de final de semana. El gobierno magiar también mantiene atascada la partida de 5.000 millones con la que la UE quiere asegurar la ayuda militar a largo plazo a Ucrania, si bien, esto no retrasa el suministro de armas a Kiev sino que dificulta que los Estado miembros reciban el reembolso de esta ayuda.