Iñaki Dufour
Dusseldorf (Alemania), 22 jun (EFE).- Jack Charlton, campeón del mundo con Inglaterra en 1966, era el seleccionador en el estreno de Irlanda en una Eurocopa, el 12 de junio de 1988 en el Mercedes Benz Arena de Berlín, con una victoria por 0-1 contra el conjunto inglés, resuelto entre el gol de Ray Houghton y las paradas de Patrick Bonner, decisivos los dos.
Una victoria histórica para la selección irlandesa, que apenas ha jugado diez encuentros en la fase final de la competición continental, con tan solo dos triunfos (el otro fue un 0-1 a Italia el 22 de junio de 2016), y un golpetazo para Inglaterra, que se fue de Alemania 1988 sin un solo punto, con tres derrotas en tres encuentros, decepcionante y decepcionada.
El principio del fin para la Inglaterra del entrenador Bobby Robson, del portero Peter Shilton o de jugadores como John Barnes, Chris Waddle o Gary Lineker en aquella edición de la Eurocopa fue contra Irlanda, que marcó el 0-1 en el minuto 6.
Kevin Moran lanzó en largo una falta, con aquel juego directo tan clásico, y empezó la agitación. No despejó primero la defensa inglesa y centró Tony Galvin al área. Tampoco rechazó bien Inglaterra, que dejó el balón para el cabezazo de John Aldridge hacia Houghton, cuyo testarazo cruzado batió a Peter Shilton, entre la apoteosis de los aficionados irlandeses en ese fondo del estadio alemán.
Inglaterra sintió el golpe, incluso salvó el 0-2 por medio de Shilton, de nuevo ante Houghton.
Nada que ver con la segunda parte, cuando el bloque de Bobby Robson dominó todo el duelo, cada aspecto del juego, menos el gol, por más que creó ocasiones sobre la portería del imbatible Pat Bonner, el protagonista del resto de la hazaña de Irlanda.
El portero, que militó en el Celtic y fue internacional en 67 ocasiones con Irlanda, con 42 tantos en contra, 31 victorias, 23 empates y 13 derrotas, fue insuperable para Lineker, que contó varias ocasiones, una de ellas al larguero; John Barnes, Bryan Robson... No hubo forma de doblegarlo. Tampoco a Irlanda, cuyo estreno fue inesperadamente triunfal.
En la segunda cita, Irlanda empató contra la Unión Soviética (1-1), con el gol de Ronnie Whelan, pero la derrota en la tercera y última jornada contra Holanda, por 0-1, con el gol neerlandés en el minuto 82 de Win Kieft a pase de Ronald Koeman lo apartó de la siguiente ronda, entonces las semifinales.
La 'oranje' se proclamó campeona en la final contra la URSS (0-2), con los goles de Ruud Gullit y Marco Van Basten.
Inglaterra, mientras, completó su peor Eurocopa de la historia, con tres derrotas seguidas. Al 0-1 contra Irlanda le siguió el 1-3 contra Países Bajos y el 1-3 contra la Unión Soviética. No volvió a ganar un partido en la fase final del torneo hasta ocho años después, el 15 de junio de 1996, cuando se impuso a Escocia. EFE
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