Johannesburgo, 19 jun (EFE).- La solemne ceremonia de investidura de Cyril Ramaphosa arrancó este miércoles en los Union Buildings, la sede del Gobierno sudafricano en Pretoria, para dar comienzo a su segundo y último mandato de cinco años, en el que encabezará un Gobierno de unidad nacional.
"Es un día fantástico para Sudáfrica, es un gran día para nuestra democracia que continúa evolucionando, con lo joven que es", declaró a medios locales antes del inicio del acto el portavoz de la Presidencia sudafricana Vincent Magwenya, rodeado de los cantos y gritos que llenaban el recinto.
"Treinta años después del comienzo de la democracia (en 1994), hoy seremos testigos de la juramentación del presidente, que es realmente el último paso constitucional que concluye este proceso electoral que hemos llevado a cabo durante las últimas semanas", tras las elecciones generales del pasado 29 de mayo, añadió Magwenya.
Después de la investidura, aseguró el portavoz, Ramaphosa "se concentrará en constituir un Gabinete que reflejará este nuevo Gobierno de unidad nacional".
Un fuerte dispositivo de seguridad podía verse en el lugar, donde la jornada empezó con un programa de actos culturales protagonizados por artistas locales.
Según medios sudafricanos, además de la población que ha acudido desde diferentes puntos del país, unos 3.000 asistentes llenan el anfiteatro de los Union Buildings, donde Ramaphosa jurará el cargo ante el jefe del Poder Judicial sudafricano, el magistrado Raymond Zondo.
El acto cuenta con la asistencia de 18 jefes de Estado y de Gobierno, además de exmandatarios, delegaciones de numerosos países y jefes tradicionales sudafricanos, según detallaron este martes las autoridades.
Algunos de los líderes presentes son los presidentes de Nigeria, Bola Tinubu; la República Democrática del Congo (RDC), Felix Tshisekedi; Angola, João Lourenço; Zimbabue, Emmerson Mnangagwa; Mozambique, Filipe Nyusi; Tanzania, Samia Suluhu Hassan; y la República del Congo (Congo-Brazaville), Denis Sassou-Nguesso, así como el rey de Esuatini (antigua Suazilandia), Mswati III.
También enviaron representantes de alto nivel Namibia, Lesoto, Uganda, Burundi, Sudán del Sur y Egipto, además de China y Cuba, con su vicepresidente, Salvador Mesa.
Asimismo, han acudido representantes de organizaciones como la Unión Africana (UA), la ONU y la Comunidad para el Desarrollo de África Meridional (SADC, por sus siglas en inglés), además de Palestina, cuya causa ha contado históricamente con el apoyo de Sudáfrica.
No asiste a la ceremonia, sin embargo, el expresidente Jacob Zuma (2009-2018), cuyo nuevo partido, uMkhonto weSizwe (Partido MK), dio la gran sorpresa en las elecciones al quedar como la tercera fuerza.
Durante el evento, para el que se han cortado las calles que rodean el recinto, las Fuerzas de Defensa Nacionales de Sudáfrica (SADF) realizarán un saludo de 21 salvas de cañón, acompañado de un vuelo del Ejército del Aire, además de una inspección y un desfile de tropas.
La investidura será la culminación de un proceso marcado por la incertidumbre, después de que el Congreso Nacional Africano (CNA), en el poder desde la instauración de la democracia y el fin del régimen racista del 'apartheid' en 1994, perdiera por primera vez la mayoría absoluta en los últimos comicios.
En esas elecciones, las séptimas generales del país, el CNA logró el 40,18 % de los votos, que se traducen en 159 de los 400 escaños de la Asamblea Nacional (Cámara baja del Parlamento), una victoria insuficiente que obligó por primera vez a la histórica formación a acercarse a otros partidos para poder gobernar.
Ese acercamiento se palpó el pasado viernes en una maratoniana primera sesión de la Asamblea Nacional tras las elecciones, en la que Ramaphosa, de 71 años, resultó elegido por 283 votos.
Horas antes de esa elección, John Steenhuisen, líder de la Alianza Democrática (AD, centroderecha liberal), hasta ahora primera fuerza de la oposición, anunció haber llegado a un acuerdo con el CNA para formar un "Gobierno de unidad nacional (GUN)".
Según confirmó este lunes el CNA, otras tres fuerzas políticas han aceptado unirse también a la alianza gubernamental: el Partido de la Libertad Inkatha (IFP, conservador y nacionalista de la etnia zulú), GOOD (socialdemócrata) y Alianza Patriótica (AP, extrema derecha).
Así, la investidura dará el pistoletazo de salida este miércoles para la formación de un Gabinete que debería incluir a miembros de los otros partidos de la coalición. EFE
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