Ciudad de México, 14 jun (EFE).- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este viernes que la polémica reforma al Poder Judicial, que propone que los jueces sean elegidos por el pueblo, busca eliminar la influencia de la delincuencia organizada y de cuello blanco en este poder.
“Lo que queremos es quitarle a los delincuentes un poder que tiene que estar al servicio del pueblo, impartiendo justicia”, expresó el mandatario durante su conferencia de prensa matutina.
El gobernante mexicano se refirió así a la iniciativa, impulsada por él mismo, que plantea la elección por voto popular de los miembros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPFJ), de un nuevo Tribunal de Disciplina Judicial y, en general, de todos los jueces de distrito y magistrados de circuito del país.
Afirmó que lo único que se está planteando en la iniciativa, “es que lo elija el pueblo, al juez, al magistrado, al ministro”.
Aseveró que el argumento de quienes se oponen a su reforma es que el Poder Judicial quede controlado, que se puedan manipular las elecciones y que delincuentes puedan tener control.
“Yo digo: ¿qué? ¿ahora no lo tienen?”, acotó.
Aseguró que las sentencias del Poder Judicial, en muchos casos, tienen que ver con los intereses de la delincuencia organizada y la delincuencia de cuello blanco.
“¿Cómo se enfrenta eso, cómo se purifica la vida pública?, con el método democrático, la participación de la gente, que el pueblo los elija”, insistió.
Señaló que los jueces, magistrados y ministros en funciones tienen la posibilidad de participar en la elección, porque “no todo está podrido” en el Poder Judicial.
Asimismo, aclaró que no cualquier persona podrá ser juez. “Tiene que ser un abogado, y le va a ayudar si además de la licenciatura tiene maestría y doctorado”.