Bruselas, 29 may (EFE).- El ministro de Protección Medioambiental de Ucrania, Ruslan Strilets, acusó hoy a Rusia de haber causado 10.000 millones de euros en daños a la infraestructura hídrica ucraniana desde el inicio de la invasión, incluidos 3.500 millones de euros atribuidos a la presa ucraniana de Nova Kajovka que Moscú destruyó el año pasado.
"El medioambiente no tiene fronteras. El agua no discrimina entre naciones", declaró Strilets en el marco de la Semana Verde de la Comisión Europea, centrada este año en el agua, quien advirtió que los desastres medioambientales causados por Moscú en Ucrania pueden afectar indirectamente a países vecinos, incluida su enemiga Rusia.
El ministro, invitado a la conferencia de dos días conocida como Semana Verde que organiza en Bruselas la Comisión Europea, y que este año está dedicada al agua, acusó a Rusia de "terrorismo acuático" y medioambiental.
Las autoridades ucranianas han registrado unos 5.000 casos de ataques al medioambiente ucraniano con más de 70.000 millones en daños, lo que supone "20 veces el presupuesto anual de Naciones Unidas", y al menos 257 casos de ecocidio, como destruir plantas químicas para contaminar los ríos.
"La cuenta sigue", añadió.
Solo la destrucción de la presa Nova Kajovka, que dejó 63.447 hectáreas inundadas, supuso la pérdida de suficiente agua para abastecer a todo el planeta durante dos años, indicó.