Sídney (Australia), 28 may (EFE).- El Gobierno de Australia calificó este martes de "horrendas" e "inaceptables" las consecuencias del ataque de Israel sobre un campo de desplazados de Rafah al sur de la Franja de Gaza, que dejó decenas de muertos.
La ofensiva, mediante la cual Tel Aviv asegura mató a dos líderes del grupo islamista Hamás, sucedió el fin de semana sobre una zona declarada previamente como "segura" por Israel, mientras que las autoridades gazatíes apuntan que en el ataque murieron al menos 45 personas, incluidas mujeres y niños.
"Los ataques israelíes tienen consecuencias horribles e inaceptables (...) Australia ha dejado muy claro que Israel no debe proceder con sus operaciones en Rafah, donde se refugian más de la mitad de los 2,3 millones de habitantes de Gaza", dijo la ministra australiana de Exteriores, Penny Wong, en su cuenta oficial en X.
En su mensaje, Wong insistió en la necesidad de "un alto al fuego humanitario para proteger a la población civil" y recalcó que Hamás "debe liberar a todos los rehenes, dejar de usar a los civiles palestinos como escudos humanos y dejar las armas".
La declaración australiana se suma a la condena de la ONU, Estados Unidos y diversos países contra este ataque israelí.
Rafah -situado en el sur del enclave palestino y donde más de un millón de desplazados se encuentran hacinados y sin servicios de saneamiento o agua potable- continúa en el foco de la ofensiva israelí a pesar de la orden de la Corte Internacional de Justicia, emitida el viernes, para la detención "inmediata" de la operación en dicho territorio.
La guerra entre Israel y Hamás tras el ataque del grupo terrorista contra varios puntos en territorio israelí del 7 de octubre pasado, ha dejado más de 37.000 muertos, entre ellos mujeres, niños y ancianos, así como periodistas y trabajadores humanitarios, entre ellos la australiana Zomi Frankcom.