Jerusalén, 27 may (EFE).- La organización islamista Hamás llamó con un comunicado este lunes a la población palestina a "escalar las actividades públicas de rabia y presión para parar la agresión y la guerra genocida" tras el bombardeo israelí contra un campamento de desplazados en Rafah, al sur de Gaza, que dejó al menos 50 muertos.
"Llamamos a nuestra gente en Cisjordania, Jerusalén, el interior ocupado y el exterior a alzarse y llevar a cabo marchas de rabia contra la masacre sionista contra nuestra gente en la Franja de Gaza", reclamaron en el comunicado.
De la misma forma, Hamás pidió a otros al mundo árabe e islámico, junto a otros países, a denunciar la guerra y reclamar el cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas, especialmente la orden de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para la detención "inmediata" de la ofensiva contra Rafah, emitida el sábado.
El movimiento laico Fatah, a la cabeza de la Autoridad Nacional Palestina que gobierna en Cisjordania, calificó con otro comunicado la masacre como un reflejo del fracaso del "derrotado" Ejército israelí "en su lucha contra la resistencia palestina".
"La Administración americana y algunos países europeos son compañeros en esta masacre que tenía por objetivo a niños, mujeres y ancianos indefensos", aseveraron.
Las autoridades palestinas informaron que más de 10 centros de desplazados, incluido el próximo a la agencia de la ONU para los refugiados palestinos en el que se produjo esta última masacre, fueron atacados en las últimas 24 horas en Yabalia y ciudad de Gaza, al norte, Nusseirat, en el centro, y Rafah, al sur de la Franja.
"Estos centros alojan a decenas de miles de civiles desplazados, especialmente mujeres y niños", denunciaron.
En la noche del domingo y madrugada del lunes, el Ejército bombardeó la zona de Tal al Sultan siguiendo "inteligencia precisa" en un ataque en el que aseguró haber matado a dos altos cargos del grupo islamista Hamás, el comandante de su división para Cisjordania, Yassin Rabia; y otro alto mando de esa misma división, Khaled Nagar.
"El ala de Hamás en Judea y Samaria (Cisjordania ocupada) es responsable de la planificación, financiación y ejecución de ataques terroristas en toda Judea y Samaria y dentro de Israel", indicó un comunicado castrense sobre ese ataque en Tal al Sultan, barrio de Rafah que las fuerzas israelíes aún no habían ordenado evacuar y que acogía a cientos de desplazados.
Rafah es uno de los núcleos de la ofensiva de Israel desde el 6 de mayo, cuando las IDF lanzaron su ofensiva contra este enclave en el que se hacinaban unas 1,4 millones de personas.
Desde entonces, más de 900.000 gazatíes han huido de este enclave a otros puntos de la Franja, entre ellos Al Mawasi, al oeste, si bien las organizaciones que operan en el territorio alertaron que esta zona costera no está preparada para acoger a los evacuados.
Unas 36.000 personas han muerto en Gaza por fuego israelí desde el inicio de la guerra y más de 80.000 han resultado heridas, la mayoría civiles, según datos del Ministerio de Sanidad gazatí. Además, este estima que unos 10.000 cuerpos continúan bajo los escombros.