Era el momento más esperado, el regreso a los escenarios de Isabel Pantoja tras una mala racha de salud que le ha tenido apartada de su agenda de conciertos con los que está celebrando 50 años de carrera. Zaragoza ha sido la ciudad en la que la tonadillera se ha reencontrado con su público que, una vez más, ha estado totalmente entregado al recital de la artista sevillana. La emoción se palpaba en el ambiente y la propia Pantoja se ha visto desbordada en más de una ocasión, sin poder reprimir las lágrimas en varios momentos del recital: cuando ha entonado el 'Marinero de luces', 'Embrujá por tu querer' y 'Por tu voz'. Sus fieles seguidores la han arropado con aplausos y coreando las letras de los éxitos que la han llevado a ser la número uno en el mundo de la copla. La artista ha repetido estilismo y ha vuelto a lucir el mismo outfit que en su concierto de Bilbao. Un vestido dorado de escote caja, manga larga con detalles brillantes, semitransparente y que completó con dos faldas. En esta ocasión el maquillaje escogido ha estado protagonizado por una paleta en tonos lila, el color favorito de su madre, que una vez más ha estado muy presente. Las semanas previas a la reaparición de Isabel Pantoja e Zaragoza han sido complicadas. En estos últimos días su nieto Albertito ha hecho la Primera Comunión, Julián Muñoz y Maite Zaldívar han vuelto a la palestra, y sólo unas horas antes del comienzo del concierto en la capital maña llegaba a España la madre biológica de Isa, con el objetivo de conocerla.