Nueva York, 23 may (EFE).- El mitin del expresidente republicano Donald Trump que se celebrará esta tarde en Crotona Park, en el territorio demócrata de El Bronx (Nueva York), deja entrever las divisiones entre los latinos que son su mayoría demográfica: algunos líderes lo apoyan y otros intentan boicotear el evento.
Crotona Park es un gran parque en el sur de El Bronx, un distrito con 1,3 millones de habitantes -en su mayoría de clase media y diversa, más del 50 % hispanos y más del 25 % negros- que sigue arrastrando mala fama por una criminalidad que es mucho menor que hace décadas pero no está extinguida.
"Trump no es bienvenido en El Bronx", clamaba esta mañana el congresista demócrata Ritchie Torres, convocando una protesta con ese lema a la misma hora en que empieza el mitin, a las 18:00 hora local, a la que se espera que acudan otros políticos demócratas, sindicatos y ONG, según medios locales.
Su postura contrasta con la de otro conocido líder latino, Rubén Díaz Sr., reverendo y exsenador estatal demócrata, y conservador, que dijo ayer a EFE: "La idea de visitar El Bronx fue de él (Trump) pero nosotros, un grupo de líderes latinos y negros, decidimos unimos para ayudarlo y la estamos coordinando".
El expresidente acude al 'epicentro' de la comunidad latina en Nueva York tras varias visitas enfocadas al votante trabajador: una bodega (colmado) en Harlem -cuyo empleado, de origen dominicano, mató a un delincuente en defensa propia en 2022-, un lugar de construcción y una estación de bomberos en Manhattan.
Trump lleva más de un mes en Nueva York debido al juicio penal por los pagos irregulares a una actriz porno con la que tuvo una aventura para silenciarla en la campaña electoral que lo llevó a la victoria en 2017.
Según se queja recurrentemente, este asunto judicial, inédito en EE.UU., lo ha dejado varado en su ciudad natal en época preelectoral, pero ha aprovechado cada jornada de juicio para dirigirse a la prensa.
El de hoy será su primer mitin en la ciudad en varios años, y se produce después de otro evento en sus cercanías que sorprendió al darle un baño de multitudes en área demócrata: el 11 de mayo, en Wildwood, una localidad playera del estado de Nueva Jersey, donde algunos medios aseguran que hubo 100.000 personas.
En Wildwood, Trump abordó sus principales temas de campaña, que se espera que hoy retome: la incompetencia de su rival, el demócrata Joe Biden, y problemas que achaca a su gestión como la crisis migratoria; el incremento del coste de vida; la inseguridad ciudadana y la "caza de brujas" judicial contra él.
El estado de Nueva York es un bastión demócrata, con el emblema progresista de la Gran Manzana, y no ha respaldado a un presidente republicano desde 1984, cuando ganó Ronald Reagan; en 2020 dio una ventaja del 23 % del voto a Biden sobre Trump.
No obstante, la populosa ciudad tiene zonas discordantes y republicanas como el distrito de Staten Island, al sur de Manhattan, y la campaña de Trump parece ver la posibilidad de rascar votos entre ciertas poblaciones descontentas con la gestión demócrata, principalmente de clases bajas.