Quito, 8 may (EFE).- El presidente de Ecuador, el empresario Daniel Noboa, aceptó este miércoles que la Fiscalía indague sobre el desarrollo de un proyecto inmobiliario vinculado a su esposa, la primera dama Lavinia Valbonesi, en un área de donde según la comunidad y organizaciones ambientalistas se han tramitado permisos para talar manglar bajo protección ambiental.
La zona del proyecto donde busca levantar cuatro bloques se encuentra en torno a un pequeño estero de la costera localidad de Olón, en la provincia de Santa Elena, donde el mandatario tiene su residencia registrada, cerca del popular y turístico balneario de Montañita.
Aunque el Gobierno ha aclarado que dicho proyecto no viola ninguna ley, varios grupos ambientalistas y políticos han criticado que se haya contratistas de la empresa de Valbonesi hayan entrado a talar y que haya sido desplegado un importante contingente de policías para controlar la protesta de la comunidad.
"Este gobierno no se desgasta en los intentos de los políticos obvios de empezar una campaña antes de tiempo", señaló este miércoles Noboa en referencia a que la fase proselitista para las elecciones generales de 2025 comenzarán recién a finales de este año.
"La decisión de Fiscalía de iniciar un proceso de investigación previa sobre el proyecto inmobiliario del que grupos políticos han tratado de aprovecharse les dará a los ecuatorianos la claridad que se merecen. Esta y todas las investigaciones sobre este caso son bienvenidas", remarcó el mandatario.
"Mientras intentan atacarnos, nosotros continuaremos nuestro trabajo en las obras que realmente le importan a los ecuatorianos", agregó.
Asimismo, Valbonesi manifestó en la red social Instagram que la investigación de la Fiscalía es lo que los ecuatorianos necesitan para aclarar esta situación. "Esta y todas las investigaciones sobre este caso son bienvenidas", puntualizó la primera dama.
De su lado, la ministra de Ambiente, Agua y Transición Ecológica, Sade Fritschi, acusada de otorgar de forma presuntamente irregular el permiso ambiental para la obra inmobiliaria, informó que la Asamblea Nacional (Parlamento) le ha convocado a una comparecencia para que explique el caso.
"Asistiré gustosa y aclararé que toda la información oficial es y siempre ha sido pública en los portales del Ministerio de Ambiente", sostuvo Fritschi, al asegurar que la zona en la que se ejecutará el plan inmobiliario "no corresponde a un área protegida".
La ministra argumentó que "la zona de implantación del proyecto urbanístico no corresponde a un área protegida" y que "intersecta con el bosque y vegetación protector natural Oloncito en un 16 %".
"El inventario forestal indicó que en el espacio en el que se desarrolla el proyecto no existe presencia de manglar ni de especies endémicas", aseveró.
El presidente de la comunidad de Olón, Jhon Reyes, señaló que los operarios ingresaron para talar veintiún algarrobos y que estos que le indicaron que también se proyectaba rellenar parte del "esterillo", una ría cuya agua puede mezclarse a veces con la del mar y que genera un lugar propicio para el crecimiento de bosques de manglar.
Varios grupos ecologistas han asegurado que la tala ejecutada en la zona corresponde a un manglar bajo protección ambiental y han denunciado el supuesto exceso en la presencia de las fuerzas de seguridad para controlar el descontento de la comunidad de Olón, ubicada cerca de la residencia del jefe del Estado.
Incluso la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la organización social más importante del país, reaccionó al suceso y calificó a la tala del manglar del Estero Oloncito como un "ecocidio".
"Condenamos la destrucción del manglar de Olón con la intención de construir un hotel cerca de la residencia del Presidente. Este acto es una flagrante violación a los derechos de la naturaleza y de las comunas", apuntó el Consejo de Gobierno de la Conaie en un comunicado.