Menor tensión con Irán permite a Israel volcar toda su atención contra Hamás

Tras una baja en las tensiones con Irán, Israel está centrando nuevamente su atención en eliminar lo que dice sería el último bastión restante de Hamás en Gaza. Esto reaviva los temores sobre el destino de alrededor de un millón de civiles refugiados en el sur de la franja.

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(Bloomberg) -- Tras una baja en las tensiones con Irán, Israel está centrando nuevamente su atención en eliminar lo que dice sería el último bastión restante de Hamás en Gaza. Esto reaviva los temores sobre el destino de alrededor de un millón de civiles refugiados en el sur de la franja.

El Primer Ministro israelí Benjamin Netanyahu se comprometió el domingo por la noche a “aumentar la presión militar y diplomática” sobre Hamás, con el objetivo de liberar a los rehenes restantes y declarar la victoria tras más de seis meses de guerra. Eso sugiere un inminente asalto a Rafah, la ciudad de Gaza cercana a la frontera con Egipto donde se ha refugiado aproximadamente la mitad de la población del enclave.

“Pronto le daremos más golpes dolorosos a Hamás”, dijo Netanyahu, sin ofrecer más detalles.

Las declaraciones fueron seguidas por ataques aéreos contra Rafah el domingo y lunes. Esa ciudad tenía antes de la guerra una población de alrededor de 280.000 habitantes. Las autoridades en Gaza dijeron que 24 palestinos murieron. La mayoría de los fallecidos fueron mujeres y niños, según el Ministerio de Salud y los informes de la prensa local.

Israel ha manifestado su intención de lanzar una operación terrestre en la ciudad como parte de su objetivo de destruir Hamás, en respuesta a la invasión del grupo el 7 de octubre en el sur del país que mató a unas 1.200 personas. Las Fuerzas Armadas israelíes estiman que entre 5.000 y 8.000 combatientes de Hamás están escondidos en Rafah, junto con algunos de sus líderes, lo cual sería su última línea de su defensa.

El plan ha estado en suspenso en las últimas semanas, más recientemente debido a la confrontación con Irán, la cual ha provocado temores de un conflicto regional más amplio.

EE.UU. ha instado a Israel a no invadir Rafah, al menos mientras la ciudad siga siendo un lugar de refugio de tantos civiles. Los palestinos en Gaza se han movilizado al sur de la franja desde que Israel comenzó su campaña, en gran medida a instancias de los militares. Grandes extensiones del enclave han sido arrasadas, las dos ciudades más grandes han sido bombardeadas y autoridades dicen que más de 34.000 palestinos han muerto.

Hamás, la organización respaldada por Irán y que tanto EE.UU. como la Unión Europea han descrito como un grupo terrorista, todavía tiene a unos 130 de los 250 rehenes tomados el 7 de octubre, aunque se asume que algunos están muertos. Netanyahu está bajo intensa presión para garantizar su regreso. Decenas de miles de personas, incluidas familias de secuestrados, han salido a las calles en protesta.

Israel tiene varias opciones para invadir Rafah, según un funcionario israelí con conocimiento de los preparativos. El ejército no necesariamente necesita atacar la ciudad con todas sus fuerzas, lo que probablemente empeoraría la crisis humanitaria. En su lugar podría mover fuerzas de un vecindario a otro y evacuar a los civiles al mismo tiempo, dijo.

En preparación de la invasión de Rafah, Israel estaría ampliando la zona humanitaria en Gaza, según la emisora ​​estatal israelí Kan. Esto le permitirá albergar a alrededor de un millón de personas desplazadas, mientras que cinco hospitales de campaña están planeados para el área, dijo Kan el lunes.

Funcionarios de EE.UU. han negado informes que Washington habría llegado a un acuerdo con Israel que daba luz verde a una invasión de Rafah a cambio de represalias limitadas contra Irán por su reciente ataque del 14 de abril.

‘Objetivo compartido’

Israel y EE.UU. discutieron la semana pasada tanto los planes contra Irán y en Gaza, y coincidieron “en el objetivo compartido de que Hamás sea derrotado en Rafah”, dijo la Casa Blanca en un comunicado el 18 de abril. EE.UU. expresó preocupaciones sobre varios cursos de acción en Rafah e Israel acordó tener en cuenta estas preocupaciones, según el comunicado.

Egipto es otra preocupación. La nación se niega a permitir que Israel envíe habitantes de Gaza a su territorio. Su argumento es que la entrada en masa presentaría una amenaza a la seguridad de Egipto y sería una traición a la causa palestina de un estado independiente. Egipto también ha advertido repetidamente contra un ataque a la ciudad. El país ha negado informes de que ha elaborado planes de contingencia para alojar a los desplazados cerca de la frontera.

Con el estancamiento en las negociaciones entre Israel y Hamás para liberar a los rehenes, es probable que el ataque contra Rafah siga adelante, dijo Eyal Hulata, asesor de seguridad nacional de Israel hasta principios del año pasado.

“Desafortunadamente no parece que haya un acuerdo por los rehenes en este momento, por lo que Israel no tiene otra opción”, dijo Hulata, quien ahora es miembro sénior de la Fundación para la Defensa de las Democracias en Washington, la cual apoya una acción más enérgica contra Irán.

Aún así, una campaña prolongada podría llevar a más críticas en el país de que Netanyahu y su gobierno están dando la espalda a los rehenes.

“La toma de Rafah llevará meses”, advirtió el ex primer ministro Ehud Barak en una reciente entrevista radiofónica israelí. “Si en seis meses volvemos al tema de los secuestrados, para entonces regresarán en ataúdes”.

Nota Original: Israel Turns Focus Back to Hamas and Rafah as Iran Threat Eases

--Con la colaboración de Fares Alghoul, Fadwa Hodali y Gina Turner.

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